El acueducto de El Novillo-Hermosillo que abrió su llave en el 2013 para garantizar el abasto de agua a Hermosillo seguirá operando por muchos años más, a pesar de las declaraciones catastrofistas de personajes que no son especialistas en la materia hidráulica.
Respecto a la versión de que el acueducto podría cancelar el trasvase de agua a Hermosillo en los próximos años, la gobernadora Claudia Pavlovich, dijo desconocer esa supuesta problemática, y consideró que deben de ser los técnicos en esa materia los que opinen al respecto.
Y es que el empresario Félix Tonella Luken, integrante de la Junta de Gobierno del organismo operador de Agua de Hermosillo, declaró que el acueducto construido para dotar de 75 millones de metros cúbicos anuales de agua a la capital sonorense por un período de 25 años, podría reducir su servicio a solo seis u ocho años.
El integrante de la Junta de Gobierno Félix Tonella, parece que está desinformado, o le informaron mal sobre la operación del acueducto, porque según lo que ha trascendido no hay obstáculo legal o técnico para que el megaproyecto hidráulico suspenda el trasvase de agua a la capital sonorense.
De hecho, dicen los que saben que el acueducto opera a su mínima capacidad al trasvasar solo 17 millones de metros cúbicos anuales de agua a la capital, y no los 75 millones programados, por lo que su operación no afecta a la presa de El Novillo, ni a la cuenca del Río Yaqui al enviar a Hermosillo solo los excedentes que antes eran desperdiciados.
Tampoco el acueducto de El Novillo o “Independencia” es la única fuente de abasto de agua de los hermosillenses, pues se sigue operando con agua que llega de la presa “El Molinito” o Félix Valdés, y de la escasa agua de la presa “Abelardo L. Rodríguez”, además de la región de “Los Bagotes” así como de baterías de pozos citadinos.
Sin duda el enorme crecimiento de la capital sonorense, es una preocupación para el gobierno municipal y estatal para garantizar el abasto de agua a la población, y por ello desde hace años se proyecta la construcción de un módulo para la capital en la futura Planta Desaladora de la región de Guaymas-Empalme, o bien construir una desaladora en la costa capitalina, y hasta hay soñadores que siguen con la idea de revivir el Plan Hidráulico del Noroeste para jalar agua desde Nayarit y Sinaloa hacia Sonora.
Lo cierto es que el acueducto de El Novillo va para largo en su operación, y solo se frenaría por los enormes costos que ocasiona al organismo operador de Agua de Hermosillo en gastos de energía eléctrica para el rebombeo de agua mediante batería de pozos, porque una cosa es segura, el costo no se le cargará a los desfalcados usuarios y tendrían que seguir subsidiando el trasvase.
Pero mientras son peras o manzanas, no existe impedimento legal o técnico para suspender el trasvase de agua desde la presa de El Novillo, siendo el único problema el financiero, pero el gobierno estatal, municipal y federal tendrán que solucionarlo sin meter mano a las tarifas del servicio de agua potable, a menos que quieran correr el riesgo del linchamiento social con el consecuente costo político.
SUPERVISA CLAUDIA EL INICIO DE CLASES
Sin contratiempos inició el nuevo ciclo escolar en Sonora, en el que el gobierno estatal invirtió 853 millones de pesos en infraestructura educativa, supervisando la gobernadora Pavlovich el arranque de clases en la primaria “Luis López Álvarez” de la colonia Café Combate, en Hermosillo.
Para la mandataria sonorense el sector educativo ha sido su prioridad al recatarlo de la debacle que heredó del anterior sexenio para garantizar una educación de calidad a los 610 mil estudiantes de este nuevo ciclo escolar, como ha sido en los tres años de su gobierno, donde Sonora se ha colocado a la vanguardia educativa nacional.
Como parte de su agenda laboral de este lunes, la gobernadora Pavlovich también abanderó a la delegación de atletas de la Ola Roja” que participará en la Paralimpiada Nacional 2018, del 24 de agosto al 5 de septiembre en Colima, Colima.
Fue en el marco de esos eventos, donde la gobernadora fue abordada por los reporteros para que opinara sobre las especulaciones del posible cierre del acueducto, de la larga ausencia del alcalde de Empalme Enrique Gómez y hasta del bloqueo ciudadano de calles.
Sobre el bloqueo de calles y bulevares, la gobernadora lamentó ese tipo de protestas ciudadanas, pues consideró que Sonora “no es el DF” donde por cualquier motivo la gente toma y bloquea calles afectando a terceros, como sucedió este lunes al impedir el tránsito vehicular por el bulevar Morelos de estudiantes y padres de familia del CBTIS 11 por problemas de falta de aulas y mesa bancos, problema que atañe al gobierno federal, y que el delegado de la SEP, Antonio Zepeda atendió y resolvió con el apoyo estatal.
Y nomás faltó que la gobernadora Pavlovich soltara la frase foxiana ¿Y yo por qué? al ser cuestionada por la larga ausencia de 70 días del alcalde de Empalme, Enrique Gómez, dejando sin resolver problemas de los trabajadores en la rielera ciudad.
Yo no soy la mamá” de ninguno de los alcaldes; ojalá lo fuera y “los agarrara a nalgadas” y me hicieran caso, dijo la gobernadora Pavlovich.
“Los alcaldes que fueron electos en los municipios tienen una responsabilidad que cumplir ante su comunidad. Es importante, en lo general, que cuidemos a quien elegimos. No puedo estar respondiendo por los actos de los demás”, dijo.
Y remató: “No soy la mamá de ningún alcalde. Soy la Gobernadora”. (g_navarro_ruiz@hotmail.com)
