El catalizador orgánico necesario para llevar a cabo el proceso de división de átomos por el que se separa el hidrógeno del oxígeno se puede construir a partir de elementos baratos y abundantes, como el carbono, el nitrógeno y el azufre. El equipo liderado por los científicos de la Universidad de Liverpool usó una combinación de experimentos empíricos y cálculos computacionales de estructuras moleculares para descubrir la composición de este fotocatalizador orgánico que podría resultar revolucionario y acelerar el uso del hidrógeno como vector energético.
“Para lograr altas tasas de evolución del hidrógeno, se necesita una buena afinidad con el agua, una amplia absorción de luz, un área de superficie alta y una alta cristalinidad. Al introducir todas estas características en un material, obtuvimos un fotocatalizador muy activo”, detalló Xiaoyan Wang, estudiante de doctorado en química por la Universidad de Liverpool.
El proyecto, una colaboración multinacional en la que participaron investigadores de China, Alemania, Holanda y Reino Unido, estuvo liderado por el profesor Andrew Cooper, quien considera que estamos ante “un buen ejemplo de la necesidad vital de contratar a los mejores investigadores de todo el mundo y colaborar con equipos en otros países”. “La ciencia de máximo nivel es una labor internacional”, aseguró.
El programa ha sido financiado por el Consejo de Investigación de Ingeniería y Ciencias Físicas (EPSRC), el Centro de Investigación para el Diseño de Materiales Funcionales de Leverhulme y el Consejo Europeo de Investigación. Con un presupuesto de 81 millones de libras (91,6 millones de euros), la Fábrica de Materiales Innovadores cuenta con unas instalaciones de 11.600 metros cuadrados para la investigación y desarrollo de materiales avanzados.
Fuente: hibridosyelectricos.com