Así lo publico en sus portales la Suprema Corte de Justicia de la Nación, al hacer mención de que un hombre imprimir al rededor de 343 correos electrónicos de su esposa.
Estos correos fueron presentados ante el juzgado para que conociera la causal del adulterio de su pareja y así obtener divorcio y custodia de sus hijos.
Por su parte las pruebas documentales presentadas fueron analizadas por la Suprema Corte y esta con el fin de salvaguardar el derecho a la inviolabilidad de las comunicaciones privadas, determina que esta prohibido grabar, almacenar, leer o registrar, sin el consentimiento de los interlocutores una comunicacion ajena.
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