En su primer día de trabajo, un guardia de seguridad de unos 60 años de edad arruinó una pintura valuada en más de un millón de dólares, tras dibujar ojos en las figuras sin rostro representadas en una obra de arte exhibida en una galería de Rusia.
La obra titulada “Tres figuras” (1932-1943), de la artista rusa Anna Leporskaya, tuvo que ser enviada a restauración, y para recuperar su estado, la empresa donde trabajaba el guardia de seguridad tendrá que desembolsar 3 mil 348 dólares.
La pintura perjudicada por la negligencia de este guardia de seguridad, quien fue despedido, formaba parte de la exposición de arte abstracto exhibida en el Centro Yeltsin, situado en la ciudad de Ekaterimburgo, Rusia.
De acuerdo con un comunicado del Centro Yeltsin, la costosa pintura fue dañada el pasado 7 de diciembre, cuando dos visitantes descubrieron que habían dibujado, con bolígrafo, algunos trazos encima la pintura que formaba parte de la exposición “El mundo como objetividad, el nacimiento de un nuevo arte”.
Según los medios locales de Rusia, el guardia de seguridad, como estaba aburrido en su primer día de trabajo, le puso ojos con un bolígrafo a dos de las tres figuras humanas representadas en la obra de arte.
La obra se envió a la galería de Moscú al día siguiente de hallar el daño y fue inspeccionada por un restaurador de arte. El daño fue catalogado de “vandalismo” por las autoridades de Rusia y el responsable deberá pagar una multa superior a 535 dólares y un castigo de trabajo en una correccional durante un año.