Una semana después de que se dieron una serie de decomisos en al menos tres tiendas asiáticas en Hermosillo, algunos de esos negocios ya fueron reabiertos, sin embargo la mercancía asegurada no les fue devuelta, la cual queda en manos de las autoridades para verificar su procedencia y si se trata de piratería o no.
Tras esos actos en los que las mismas autoridades informaron que se sacaron del mercado alrededor de un millón de piezas, con un valor que supera los 150 millones de pesos, existe la duda de qué se hizo con esos paquetes, la cual fue resuelta por el gobernador Alfonso Durazo Montaño.
Ante la pregunta de si dichos productos serían destruidos, respondió que quizás no todos, ya que si hay algunos que sí son legales, eso pasarían a manos del gobierno federal para utilizarlos en algún esquema de ayuda a la población vulnerable.
“Una parte se destruye por razones de propiedad industrial, todo aquello que es producto de la piratería, pero otro se entrega al Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado, de tal manera que puedan formar parte de algún programa social” Dijo Alfonso Durazo Montaño.
