El Aeropuerto Internacional de Tijuana enfrenta una crisis que afecta a miles de viajeros debido a las condiciones climáticas adversas, especialmente la densa neblina que ha cubierto la región en los últimos días. Este lunes, la mayoría de los vuelos fueron cancelados, dejando a muchos pasajeros sin poder llegar a sus destinos a tiempo.
Desde el fin de semana pasado, las aerolíneas emitieron avisos anticipando la posible suspensión de despegues y aterrizajes debido a la falta de visibilidad, lo que llevó a que algunas personas ya acumulen hasta tres días esperando una solución.
De acuerdo con reportes oficiales, hasta el momento se han cancelado 53 vuelos y otros 10 han sido demorados, afectando a miles de viajeros nacionales e internacionales. En la terminal aérea, las filas para reprogramar vuelos o solicitar información son interminables, mientras que la sala de espera está repleta de personas buscando alguna respuesta o alternativa para continuar con sus itinerarios.
Los pasajeros han expresado su frustración, pues muchos de ellos necesitaban llegar a sus destinos por compromisos laborales, familiares o médicos urgentes. Aunque las aerolíneas han ofrecido reprogramaciones y algunas compensaciones, la alta demanda y la persistencia del mal clima complican el panorama.
Las autoridades del aeropuerto recomendaron a los viajeros mantenerse atentos a las actualizaciones de sus vuelos y consultar directamente con las aerolíneas antes de dirigirse a la terminal. Mientras tanto, las condiciones meteorológicas continúan siendo monitoreadas de cerca, a la espera de una mejora que permita reanudar las operaciones aéreas con normalidad.
Este incidente pone de relieve los retos que enfrentan los aeropuertos ante fenómenos naturales y la importancia de contar con estrategias efectivas para minimizar el impacto en los pasajeros.
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