
Cuando los visitantes regresan a Sonora durante las vacaciones, especialmente en Navidad, las reuniones familiares y los reencuentros con amigos van acompañados de algo esencial: la comida. Los sabores tradicionales de la región son un puente emocional hacia los recuerdos de la infancia y la identidad cultural. A continuación, te presentamos los platillos más buscados por quienes vuelven a casa en esta temporada.
1. Carne asada
El asador se convierte en el centro de las reuniones familiares. La carne asada sonorense, conocida por su calidad y frescura, se sirve con tortillas de harina, guacamole y una salsa picosa. Para muchos, este platillo representa la esencia de la convivencia en Sonora.
2. Tamales sonorenses
En Navidad, los tamales son un infaltable. Elaborados con masa de maíz y rellenos de carne de res o cerdo, se distinguen por su sabor único, resultado del toque sonorense en la preparación de la carne.
3. Tacos de cabeza
Un clásico de los desayunos y cenas, los tacos de cabeza son una parada obligatoria. Con tortilla de maíz recién hecha, estos tacos incluyen opciones como cachete, lengua, labio y sesos, acompañados de cebolla, cilantro y una salsa bien picosa.
4. Hot dogs del Chinal
No hay mejor opción para una cena casual que los famosos hot dogs estilo sonorense, y los del Chinal son icónicos. Con salchicha asada, pan ligeramente dorado, frijoles, jitomate, cebolla asada, tocino y una mezcla de salsas, son un placer que muchos ansían probar al regresar.
5. Pozole
Un buen plato de pozole rojo o blanco también es protagonista en las mesas navideñas. Con maíz cacahuazintle, carne de cerdo o pollo y acompañado de rábanos, lechuga y limón, es un plato ideal para el clima fresco de la temporada.
6. Burritos de machaca
Hechos con tortillas de harina y rellenos de machaca de res o venado, los burritos son una opción rápida y deliciosa que transporta a los visitantes al sabor auténtico de Sonora.
7. Gallina pinta
Este guiso tradicional, preparado con carne de res, maíz y frijol, es muy buscado por su sencillez y sabor hogareño. Perfecto para una comida reconfortante en familia.
8. Chilorio
Originario del norte de México, el chilorio de Sonora, preparado con carne de cerdo desmenuzada y aderezada con chile, es un platillo que muchos extrañan y buscan al regresar.
9. Menudo
Después de las largas noches de celebración, el menudo se convierte en el remedio favorito. Este caldo de pancita de res, condimentado con especias y chile, es perfecto para recargar energías.
10. Coyotas
Para el postre, las coyotas son un clásico. Estas galletas de harina rellenas de piloncillo son ideales para acompañar con café en las tardes frescas.
11. Mariscos frescos
Aunque es invierno, los visitantes no se pierden la oportunidad de disfrutar de ceviches, aguachiles y tacos de pescado fresco, aprovechando la cercanía al Mar de Cortés.
12. Capirotada navideña
Este postre, típico de las festividades, combina pan, piloncillo, pasas, cacahuates y queso. La capirotada es un dulce que evoca los recuerdos de las abuelas en la cocina.
La conexión emocional con la comida
Para los sonorenses que viven fuera, volver a probar estos platillos no es solo disfrutar de su sabor; es reconectarse con su tierra, sus raíces y sus seres queridos. La comida sonorense se convierte así en el corazón de las vacaciones, uniendo generaciones y recordando lo que significa estar en casa.
Sonora no solo recibe visitantes; recibe a hijos, hermanos y amigos que vuelven para llenar su alma y su paladar con los sabores de siempre.
