Este viernes 27 de junio, Caminos y Puentes Federales de Ingresos y Servicios Conexos (Capufe) dio a conocer que en breve la mayoría de las casetas ya no recibirán efectivo, es decir, que sólo se podrá pagar el peaje con TAG.

Se trata de la estrategia de modernización Cero Efectivo, que busca reducir las filas y mejorar la experiencia de los usuarios; y si bien la medida no aplicará en todos los carriles, lo mejor para evitar contratiempos es contar con el TAG.
Este dispositivo electrónico se compra en la página web de IAVE y Capufe, cuesta 90 pesos, ya con IVA; y se puede recargar con tarjeta bancaria, pago en tiendas de conveniencia o en la misma plataforma.
Para comprarlo en línea, se debe llenar un formulario con datos de contacto como nombre, teléfono y correo electrónico. Después, se debe elegir el sitio donde se recogerá un par de días después (puede ser una plaza de cobro, oficinas centrales o casetas).
¿Cuánto se le puede recargar al TAG?
De acuerdo con la página web de IAVE, el TAG se debe recargar con mínimo 200 pesos y un máximo de 2 mil pesos en cada transacción.
Y si te preguntas si hay un límite de saldo que soporta el dispositivo, la respuesta es sí. El saldo máximo que puede tener un TAG IAVE es de 3 mil pesos, según el portal.
Si se intenta recargar más de esa cantidad, es probable que la transacción sea rechazada o que el excedente no se aplique al TAG.
También es importante saber que el saldo del TAG IAVE tiene una vigencia de un año a partir de la fecha de recarga, por lo que la recomendación es usarlo y no dejar que se acumule.
¿Hay más TAG además de IAVE?
Otros TAG válidos y que también tienen límite máximo de saldo de 3 mil pesos son:
- PASE: Cuesta 100 pesos en módulos propios, 150 en tiendas y 180 pesos en campo
- TeleVía: Cuesta 150 pesos
- EasyTrip: Cuesta 130 pesos
- ViaPass: Cuesta 150 pesos
Estos, al igual que TAG IAVE ofrecen modalidades de prepago (se hace la recarga antes de usarlo) y de pospago (el pago se hace directo a la tarjeta de crédito registrada).
Además, funcionan tanto en las casetas y puentes operados por Capufe, pero también en aquellas vías que están concesionadas a empresas privadas, como el Circuito Exterior Mexiquense o la Autopista Urbana Siervo de la Nación, por mencionar ejemplos.