Durante su presentación en San Francisco como parte de la gira Lifetimes Tour, la cantante Katy Perry vivió un momento de tensión cuando la mariposa mecánica que la transportaba sobre el escenario sufrió una falla técnica.
El incidente ocurrió mientras la artista realizaba una entrada aérea, sorprendiendo al público con su característica puesta en escena.
A pesar del contratiempo y del evidente riesgo de caída, Perry logró sostenerse con firmeza, evitando el accidente sin perder la compostura ni detener el espectáculo.
Con humor y sangre fría, la intérprete remató la canción con la frase: “Hoy no, Satanás”, ganándose la ovación del público por su profesionalismo. El equipo técnico aún no ha emitido una explicación sobre el desperfecto.