Un equipo internacional de científicos descubrió en la provincia de Santa Cruz, Argentina, los restos fósiles de un reptil que habitó la región hace unos 70 millones de años, en pleno auge de los dinosaurios.

El animal, pariente lejano de los cocodrilos actuales, alcanzaba cerca de cuatro metros de longitud y se distinguía por su poderosa mandíbula y dientes cónicos, adaptados para capturar presas de gran tamaño en riberas y llanuras.
La investigación fue encabezada por el paleontólogo Fernando Novas, del Conicet y la Fundación de Historia Natural Félix de Azara, con la colaboración de especialistas de Brasil y Japón.
El hallazgo aporta nuevas pistas sobre la diversidad de depredadores que coexistieron en la Patagonia durante el período Cretácico, un ecosistema donde no solo reinaban los dinosaurios, sino también otros grandes reptiles que competían por alimento y territorio.