La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que su gobierno intensificará las acciones contra el llamado huachicol fiscal, tras las recientes detenciones ligadas a una red de importación ilegal de diésel detectada en el puerto de Tampico.

Sheinbaum explicó que las investigaciones revelaron un esquema mediante el cual empresas ingresaban diésel al país bajo una clasificación aduanera distinta, lo que les permitía evadir impuestos y comercializarlo de forma irregular en territorio nacional.
“Estamos enfrentando no solo el robo directo de combustibles, sino también operaciones fraudulentas que afectan las finanzas públicas y benefician a grupos delictivos”, declaró la mandataria.
La presidenta subrayó que este tipo de prácticas representan pérdidas millonarias para el Estado y generan competencia desleal para las empresas que sí cumplen con la ley. Además, adelantó que se revisarán con mayor rigor las importaciones de combustibles en puertos y aduanas para evitar nuevas irregularidades.
Sheinbaum reiteró que su administración continuará con una política de “cero tolerancia” frente al huachicol, tanto en su modalidad tradicional como en las variantes fiscales que han surgido en los últimos años.