El acelerado deshielo en el sudeste de Alaska ha dado lugar a un descubrimiento geológico sorprendente: una nueva isla ha emergido en el lago Alsek.
Denominada Prow Knob, esta formación permaneció unida al glaciar Alsek durante siglos, pero el retroceso del hielo provocó su separación, convirtiéndola en un terreno independiente de aproximadamente cinco kilómetros cuadrados, rodeado completamente por agua.
La NASA confirmó la aparición de la isla en agosto de 2025, a través de imágenes del satélite Landsat 9, que documentaron la ruptura final entre la isla y el glaciar. Este hallazgo ofrece a los científicos una oportunidad única para estudiar los efectos del cambio climático en la geografía de la región y la dinámica de los glaciares.