Quince manifestantes en Cuba fueron condenados con penas de hasta nueve años de prisión tras participar en protestas el 17 de marzo de 2024, motivadas por prolongados cortes de electricidad y escasez de alimentos, informó el Tribunal Supremo de la isla.
Los disturbios se registraron en tres ciudades, donde cientos de personas salieron a las calles durante un fin de semana caracterizado por apagones que alcanzaron hasta 13 horas diarias en algunas provincias.
El Tribunal indicó que los acusados cometieron delitos de desórdenes públicos, atentado, resistencia, desacato, desobediencia e instigación a delinquir. En Bayamo, ocho fueron condenados a entre 6 y 9 años de prisión, cinco a entre 3 y 5 años y dos más a trabajo correccional sin internamiento.
Este episodio refleja la creciente tensión social en Cuba ante la crisis energética que ha provocado seis apagones generalizados en menos de tres años, situación que ha afectado la vida cotidiana de millones de ciudadanos y generado un clima de protestas y descontento en varias regiones del país.