Montana, EE.UU. — Un grupo de estudiantes de preparatoria descubrió una insólita ley estatal que establece que si un alumno llega a la escuela a caballo, el director debe hacerse responsable de alimentarlo y pasearlo durante la jornada escolar.
Al enterarse de la peculiar disposición legal, los jóvenes decidieron ponerla a prueba en su último día de clases: decenas de ellos aparecieron montando sus caballos frente a la escuela, provocando la sorpresa de maestros, padres y vecinos.
Fiel al mandato de la ley, el director cumplió con su deber: dio de comer a los caballos, los paseó y se tomó la situación con humor, reconociendo el ingenio de sus alumnos.
Las imágenes se viralizaron rápidamente en redes sociales, mostrando a los estudiantes frente al edificio escolar con sus caballos y al director cumpliendo sus “nuevas responsabilidades” con una sonrisa.
Más allá de la broma, el episodio se ha vuelto símbolo del espíritu rural y del orgullo local de Montana, recordando que en este estado las tradiciones del Viejo Oeste siguen muy vivas… y también en los códigos legales.
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