Joaquín Guzmán López, uno de los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán, admitió este lunes su responsabilidad en dos cargos relacionados con narcotráfico y crimen organizado ante una corte federal en Illinois. La declaración ocurrió frente a la jueza Sharon Johnson Coleman, en el Distrito Norte de ese estado.
Durante la audiencia, Guzmán López —conocido como El Güero dentro del Cártel de Sinaloa— también reconoció haber participado en 2024 en el secuestro de Ismael El Mayo Zambada García, uno de los máximos líderes históricos de la organización criminal, con la intención de trasladarlo a territorio estadounidense.
Con este acuerdo, Guzmán López se convierte en el segundo de los llamados “Chapitos” en aceptar cargos ante la justicia estadounidense. En septiembre, su hermano Ovidio Guzmán se declaró culpable de cuatro delitos vinculados al tráfico de drogas en la misma corte.
Las imputaciones contra Joaquín Guzmán López abarcan actividades ilícitas cometidas entre 2008 y 2021, periodo en el que, según fiscales, participó en el tráfico de grandes cantidades de cocaína, heroína, metanfetamina y marihuana hacia Estados Unidos como integrante de la facción de Los Chapitos.
