Sin treguas, la campaña de Lamarque.- Sabe escuchar a la ciudadanía, registra sus necesidades de comunidad y de familia.- Luchará, en el Congreso, por tarifas eléctricas justas.- Le exponen el grave problema de drogadicción y abandono.- Quiere, Cajeme, un diputado surgido del pueblo
Bernardo Elenes Habas
Con amplia respuesta, la campaña de Javier Lamarque por la diputación federal, Distrito 06 Cajeme.
De los aspirantes a ese escaño de la Cámara Baja en el Congreso de la Unión, es el morenista quien tiene mayor experiencia en el servicio público, asimismo como constructor de los puentes de enlace con la ciudadanía, por donde transitarán los votos el 1 de julio.
Platiqué con él, ante humeantes tazas de café, hace unos días. Ahí quedó claro que a pesar de lo evidente del fenómeno político-social que representa Andrés Manuel López Obrador en esta etapa crucial para México, no cuelga sus anhelos de candidato en la popularidad de AMLO. Por el contrario, mantiene, en su campaña, el nombre del tabasqueño por delante, para que el número de votos que lo conviertan en presidente de la República, traduzcan esa realidad en un hecho histórico que no deje lugar a dudas, ni resquicios para fraudes, como me dijo.
Javier fue regidor del Ayuntamiento de Cajeme durante el trienio ejercido por Raúl Ayala Candelas (1994-1997). Luego fue
alcalde (1997-2000). Conoce sobradamente la realidad de Cajeme, comprendido en el Distrito 06. Fue asesor en la Jefatura de Gobierno del Distrito Federal, durante la gestión de López Obrador. Fundador y presidente del primer Comité Ejecutivo Estatal de Morena, entre otros cargos políticos.
Esto demuestra, pues, que posee la experiencia sobre los procedimientos fundamentales que se utilizan en las estructuras de gobierno y el Congreso de la Unión, por ello su disposición para promover iniciativas ciertas, surgidas desde las voces y las vivencias de las familias, de las mujeres, los jóvenes, adultos mayores, 
gente con capacidades diferentes, habitantes de pueblos originarios.
Tiene claro que deberá luchar en la Cámara de Diputados por tarifas eléctricas accesibles para una región donde el verano aniquila, enferma, mata.
Y en ese proyecto, buscar que adultos mayores y discapacitados, alcancen la preferencia llena de justicia de que sus recibos vengan con descuentos del 50 por ciento, como ya se hace en agua potable, en transporte federal, junto con la obligatoriedad de la pensión universal.
Mantiene, Lamarque, su atención en las voces llenas de angustia de madres de familia que le expresan su impotencia al no poder hacer nada por sus hijos que caminan inmersos en batallones de
sombras hacia las cárceles o hacia la muerte, al convertirse, por las drogas terribles, en seres insensibles…
Esas llamadas desesperadas encontrarán respuesta en el Gobierno que presidirá López Obrador, porque se prevén proyectos de salud, prevención, atención y rescate de quienes sufren el flagelo de la drogadicción, misma que tiene su raíz en el abandono, la desintegración familiar, la miseria a que han sometido sexenios y sexenios a grandes segmentos de población, señala.
Ahí va Lamarque, sembrando ideas y propuestas entre habitantes de colonias populares, en los tianguis, centro comercial, paradas de camiones, edificio de Seguridad Pública, comunidades rurales como Buenavista, Hornos, Pueblito Kilómetro 9, Comisaría de Esperanza, porque anhela ser diputado federal para servirle a Cajeme.
La gente lo recibe en la Central Camionera, Tianguis del Ferrocarril, lo escucha, lo apoya con alta y noble dignidad, porque quieren que salga, el próximo 1 de julio, un diputado de las entrañas de pueblo.
Le saludo, lector.
