En Cajeme, derrotar la abstención.- Y como premisa esencial, presentación de candidatos capaces de ganar por su esfuerzo no por contagios o por oleajes que imponen, arrastran y hacen triunfar personajes sin trazado social y vacíos.- Elecciones verdaderas para el 2024, con el alma del voto popular.
Bernardo Elenes Habas
A pesar de lo que pregone la voz de las encuestas, respecto a futuros triunfos electorales de Morena en diferentes municipios de Sonora (excluyendo a Hermosillo, donde Antonio Astiazarán le ha dado nuevo rostro al quehacer social y al desarrollo de su comunidad), el ejercicio político debe dignificarse con la objetiva apertura de elecciones en las urnas para la ciudadanía en general.
Luchar por la afluencia mayoritaria del padrón respectivo del INE, derrotando al abstencionismo con su fantasma de desencanto e indolencia, será fundamental para quienes se erijan como candidatos a los diferentes cargos de elección popular de los ámbitos locales y federal.
Quienes aspiran en Cajeme a reelegirse o a encabezar planillas y fórmulas renovadas por la alcaldía, diputaciones locales, la federal y el escaño en la Cámara de Senadores, deberán enfrentar ese compromiso con razonada fe republicana y democrática, más allá de fanatismos que aseguren triunfos ciegos y por lo mismo inexplicables. Así me lo comentan observadores profundos del devenir político-social del país, retrayendo sus puntos de vista a este municipio del sur de Sonora.
Con una actitud de esta dimensión –señalan-, se estaría privilegiando el verdadero ejercicio democrático con el valor del voto inteligente, y desterrando, de paso, los triunfos de “contagio, de influencias, de oleaje que arrasa e impone personajes sin trazado social, sin experiencia, quitándole al quehacer político oficio, profundidad, compromiso plural y nombre y apellido”.
Por eso es importante –comentan- que se valore y se respete a quienes se sumarán a la contienda que viene, provengan de cualquiera de los partidos que definen sus plataformas para el proceso del 2024, abriendo con ello la expectativa de que el verdadero triunfo lo dará la ciudadanía con su voto razonado y venciendo al nefasto abstencionismo.
¿Aspirantes? Los hay con trayectoria y capacidad, dignificando a sus partidos Morena, PRI, PAN, MC, PT, PVEM, PRD, e incluso ciudadanos que sin tener filiación podrían ser invitados por algunos de los institutos políticos, o bien, tomar la decisión de transitar por la libre.
¿Nombres? Repito aquí algunos nombres que enlisté en despachos anteriores. Personajes que bien podrían buscar relevar a Javier Lamarque (el mismo Javier tiene méritos para estar en las boletas del 2024, buscando reelegirse o bien, construyendo camino hacia la Cámara Alta del Congreso de la Unión) en la presidencia municipal de Cajeme, o disponerse a ser parte del parlamento local o de la Cámara Baja en el Congreso de la Unión, incluyendo la Senaduría que ya se renueva para Sonora.
Entre las mujeres sobresalen María del Rosario Oroz, Patricia Patiño, Lucy Navarro, Matilde Lemus, Anabel Acosta, Ernestina Castro, Elisa Morales, Ivonne Llamas, Gabriela Martínez, Sara Piña, Deni Gastélum Barreras, Adriana Torres de la Huerta, María Eugenia García Ruiz, Margarita Vélez, Enriqueta Rodríguez. Y en el caso de los varones, Jesús Félix Holguín, Héctor Raúl Castelo, Pedro Chávez Becerra, Rogelio Díaz Brown, Fernando González Meza, Ascensión López Durán, Emeterio Ochoa Bazúa, Luis Miguel Castro Acosta, Fructuoso Méndez, Heliodoro Montoya, Luis Alfonso Valenzuela, Abraham Montijo, Fredy Verduzco, Adalberto Rodríguez Sáinz, Manuel Montaño, Manuel Scott, Noé Alejandro Ibarra, Jorge Alberto Ponce Salazar, Fidel Antonio Covarrubias Miranda, Mario Saucedo Gómez, José Guerra Fourcade, entre muchos personajes más, quienes no pasan desapercibidos al escrutinio de la ciudadanía…
Le saludo, lector.
