Gobierno de puertas abiertas en Cajeme.- Javier Lamarque establece Audiencias Públicas que tendrán lugar todos los miércoles, como una forma de atención directa a la ciudadanía.- En el pasado, Chuy Félix instituyó ese importante ejercicio popular; y en 1997, Adalberto Rosas trabajaba con las puertas de su oficina de par en par.
Bernardo Elenes Habas
Como lo hizo hace 24 años, cuando fue por primera vez alcalde de Cajeme, Javier Lamarque abre las alternativas de comunicación entre ciudadanía y autoridades.
Primero, eliminó la semana anterior, los canceles que no permitían un acceso más directo de las personas que buscan en Palacio, una audiencia con las autoridades y se convertían en barreras para llegar a esas oficinas. Y ahora, anuncia un programa de audiencias públicas que tendrán efecto los días miércoles de cada semana, con horarios de 11:00 a 14:00.
Ahí estará el Presidente Municipal junto a sus funcionarios, atendiendo diferentes demandas de la gente para lograr soluciones inmediatas, o bien, encauzarlas hacia dependencias e instituciones de los tres niveles de gobierno.
El Alcalde Lamarque fue quien dio apertura a las audiencias de Cabildo para que la ciudadanía pudiera estar presente en 1997, duante su primera travesía conduciendo los destinos del Municipio, sembrando así la semilla cívica que establece que la administración pública debe mantenerse abierta ante los ojos y requerimientos de las familias, porque es la sociedad quien define a través de su voto, gobiernos y goberenantes.
Algo similar hizo Jesús Félix Holguín al estar al frente de los destinos del Municipio durante dos trienios: Primero por el PRI en 1988-1991, luego abanderando al PAN en 2003-2006. Chuy y sus colaboradores mantenían una vez por semana las audiencias del pueblo, y también era notorio que saliera por las mañanas en diferentes días de la semana a atender a la gente que esperaba hablar con algún funcionario en los pasillos de Palacio. Escuchaba esas voces y entregaba tarjetas con ordenamientos específicos para los integrantes de su gabinete.
Otro personaje de la política cajemense, fue Adalberto Rosas López (1979-1982), quien mantenía las puertas de su oficina abiertas, espacio que se llenaba de mujeres, hombres, jóvenes, quienes planteaban al popular “Pelón”, a quien habían convertido en alcalde con el poder de sus votos, los problemas de sus comunidades.
“Esta casa es de ustedes, y pueden entrar y salir cuantas veces quieran”, les decía Adalberto, quien tenía un amplio apoyo en su esposa Bettina Mazón.
Cierto, pues, ayer jueves las familias recibieron con beneplácito el anuncio formulado por Lamarque Cano en su conferencia Diálogo con Cajeme, sobre la creación de un nuevo espacio para la comunidad.
Algunas amas de casa expresaron al reportero que ya hacía tiempo que no se sentía disposición de los presidentes para escuchar a su gente. “Es una buena medida de política social, porque podemos buscar solución a problemas de nuestras familias y de las colonias y comunidades donde vivimos”.
Y, sin lugar a dudas, Javier reafirma su convicción de sustentar un gobierno de puertas abiertas, “que escucha y atiende a la gente”, como el mismo señala.
Le saludo, lector.
