Beatriz Paredes Rangel, en Cajeme.- Se solidarizó con el sector agrícola, con los campesinos del sur de Sonora, porque es una mujer de raíces y de conciencia rural.- Resaltó la importancia de la producción agrícola para sustentar la alimentación de las familias.- Ahí estuvieron sus amigos.
Bernardo Elenes Habas
Beatriz Paredes Rangel, mostró su conciencia política y su hechura moral, desde Cajeme para México.
Dejó claro ante dirigentes del Frente Amplio, militantes de PRI, PAN, PRD y ciudadanía sin filiación partidista, que ejercer la actividad política es algo más profundo que la búsqueda del poder, porque la premisa ineludible es enfrentar y resolver los problemas de México, sembrar la unidad y la convivencia desde la parcela colectiva de la Patria, nunca la polarización, nunca el odio, nunca el perverso propósito de enfrentar a mexicanos contra mexicanos.
Beatriz, la mujer de raíces campesinas, quien ha sostenido una carrera política-social profunda y transparente, alzó la voz y se solidarizó con el sector agrícola en el corazón del Valle del Yaqui, parte de nación que alguna vez alzó sus banderas jubilosas de Granero de México.
Hizo referencia en su mensaje, la calurosa tarde del 3 de agosto, que el actual Gobierno Federal busca “tronar” al sector agrícola, y se comprometió a impulsar, de lograr la candidatura y luego la conducción de México, una política de estrategia renovada a beneficio del campo y la agricultura, apoyo con subsidios, presupuesto y la toma de decisiones desde el fondo de la problemática del sector, considerando ella conoce las necesidades de la producción agrícola, porque lleva el campo en la sangre.
«Si tengo el privilegio y el apoyo de ustedes, campesinos y agricultores de encabezar el Frente Amplio Por México, por primera vez en los próximos años en el Gobierno Federal tendremos gente con conocimiento del sector agrícola, por la importancia de la alimentación», les dijo, entregando su palabra, la que vale tanto como su firma, ampliando su propuesta hacia Guaymas, Bácum, San Ignacio Río Muerto, Huatabampo, Etchojoa, Navojoa y Álamos, donde está la semilla y el temple de mujeres y hombres que han sabido vencer al desierto.
Se encargó de darle la bienvenida en el foro del Centro Magno de Ciudad Obregón, el dirigente estatal del PRI, Rogelio Díaz Brown, quien hizo referencia a la sensibilidad y conocimiento de Beatriz, que le confieren fortaleza para la construcción de un mejor país, llegado el caso.
Es una mujer que sí va a comprender a los agricultores, con el diálogo y el entendimiento, dijo Rogelio, porque es lo que se necesita para sacar adelante al sector agropecuario de este país, “sí va a entender a los jornaleros, a los empresarios y a toda la sociedad, una mujer que sí entiende el verdadero desarrollo social y va a sacar adelante los grandes problemas”.
Lupita Luzanilla, formuló la urgencia de un plan de emergencia que abarque al campo y a las zonas urbanas, atención médica comunitaria para niños con cáncer, con medicamentos y servicios médicos en ese sentido, así como retomar las escuelas de tiempo completo con alimentación en beneficio del desarrollo y aprendizaje de los estudiantes.
Presentes en la reunión, amigos de Beatriz Paredes Rangel, como Alfonso Elías Serrano, Julián Luzanilla, Guillermo Hopkins, al ex-alcalde Faustino Félix Chávez, María del Rosario Oroz Ibarra, Juan Leyva Mendívil, Manuel Borbón, asimismo integrantes de la tribu Yaqui y Mayo, mujeres y miembros de los sectores productivos agrícolas.
Le saludo, lector.
