Capturadepantalla2024-04-26alas192343
PrevencionEmbarazo
Lactanciapornostros4
Capturadepantalla2023-02-13alas213814
Capturadepantalla2023-02-13alas214531
Capturadepantalla2022-09-12alas043937
Capturadepantalla2023-02-13alas215907
Capturadepantalla2023-02-13alas220711
previous arrow
next arrow

Las instituciones públicas de salud que dan atención en Hospitales denominados de Alta
Especialidad, se otorga en el tercer nivel de atención, ya que concentra la tecnología y el
equipo de mayor costo, y pacientes cuyos problemas de salud requieren de este tipo de
insumos. ¿Qué quiere decir esto? Requieren de un recurso económico mucho mayor, a un
hospital convencional de segundo nivel.

El tercer nivel de atención, con algunos matices, es considerado por las distintas
instituciones, en el que tiene la mayor capacidad resolutiva por los recursos tecnológicos y
médicos, y cuya función asistencial se concentra en los problemas de mayor complejidad.
El concepto de la atención médica de alta especialidad se entiende como la forma de
realizar la práctica médica de una especialidad, en un determinado lugar, en donde la
infraestructura es planificada y las condiciones para su ejercicio se caracterizan por contar
con tecnología de punta, idónea, así como por la suficiencia y oportunidad de los insumos,
no solo para la atención desde el punto de vista clínico y quirúrgico, sino también para la
investigación, la formación y la actualización de recursos humanos competentes. Orientada
hacia la atención de daños a pacientes cuyo perfil se caracteriza por la alta complejidad
para el diagnóstico y el tratamiento, con costo elevado (para la institución y no para el
paciente que por su derecho habiencia, está cubierto). A partir del viernes pasado, el
presidente emitió un decreto que ordena transferir al IMSS-Bienestar seis hospitales
federales de alta especialidad que pertenecían a la Secretaría de Salud. Se trata de los
hospitales regionales de alta especialidad del Bajío, el de Oaxaca, Yucatán, Ciudad Victoria
e Ixtapaluca, así como del Centro Regional de Alta Especialidad de Chiapas. Esas unidades
médicas serán administradas por el nuevo organismo de salud, según establece el Decreto
por el que se desincorporan por fusión el Centro y los Hospitales Regionales de Alta
Especialidad que se indican con el IMSS-Bienestar. Lo anterior significa que los recursos
humanos, presupuestarios, financieros y materiales de los hospitales de especialidad
también serán gestionados y transferidos al IMSS-Bienestar. De los seis hospitales que se
fusionarán con el nuevo organismo sanitario, tres fueron construidos bajo el esquema de
asociación pública-privada durante sexenios pasados. Este modelo implica diseñar,
construir, operar y mantener los hospitales con dinero privado a cambio de que el gobierno
federal pague un monto anual por un tiempo determinado para cubrir el costo. De esta
manera, la operación de las unidades médicas, creadas como organismo descentralizado de
la Administración Pública Federal, queda a cargo del gobierno y puede disponer de ellas,
siempre y cuando cumpla los contratos celebrados con los privados. Uno de estos hospitales
es el Regional de Alta Especialidad del Bajío, ubicado en León, Guanajuato. El contrato de
esta unidad médica de 247 camas se asignó en 2005 y establece que el gobierno pagará por
su mantenimiento y operación un monto anual de 354 millones de pesos durante 25 años. A
la fecha, quedan siete años vigentes de ese acuerdo. También se decreta el traspaso del
Hospital Regional de Alta Especialidad de Ciudad Victoria “Bicentenario 2010”, por el que
el gobierno federal paga anualmente 531 millones de pesos desde 2007 y restan nueve años
para concluir el contrato firmado por 25 años. El otro hospital es el Regional de Alta
Especialidad de Ixtapaluca, con un costo al año de 622 millones de pesos. El contrato inició
en 2009 y duraría 25 años.

Antes de publicar el decreto, el presidente López Obrador informó que su gobierno busca
adquirir estos hospitales o renegociar los contratos. El cambio, estos hospitales mantendrán
su personalidad jurídica y el IMSS-Bienestar debe encargarse de todas las acciones que se
encuentren en proceso, incluidas las obligaciones derivadas de juicios y procedimientos
administrativos y de instrumentos contractuales iniciados. Este decreto abre la puerta a que
el IMSS-Bienestar también gestione los servicios de salud de alta especialidad para la
población sin seguridad social. Hasta ahora, el organismo sanitario contaba únicamente con
clínicas y hospitales de segundo nivel, es decir, proveía atención médica básica y de
especialidad que no fuera de alta complejidad. Ahora vamos a ver si funcionará con
recursos propios ya que están siendo prácticamente “expropiados” experimentando una vez
más con la salud de los mexicanos.

Dr. César Álvarez Pacheco
cesar_ap@hotmail.com
@cesar_alvarezp
Huatabampo, Sonora

Comentarios