En un silencioso Foxborough, América mantuvo el ritmo que lo caracteriza. Vertical, poderoso y con displicencia, el Águila se metió a la cancha del New England Revolution para prácticamente resolver su serie de los cuartos de final de la Liga de Campeones de la Concacaf, 0-4 final.
El campeón de México se aprovechó del peor equipo de la Major League Soccer. Los Revs nunca se metieron al encuentro, errores puntuales le costaron el resultado y el ave va que vuela a semifinales.
La noche en el Gillette stadium fue como aquellas que el quarteback Tom Brady disfrutó en su etapa con los Patriotas. El cuadro crema no tuvo a mariscal de campo titular, pero encontró el desahogo en el recuperado Álvaro Fidalgo, quien se notó hambriento de protagonismo desde el silbatazo inicial.
La lluvia, el frío y un rival que quiso llevar el encuentro a lo físico no mermaron al monarca azteca, que respondió temprano con presión alta desde la pradera izquierda. El Chicote Calderón robó una pelota y se la dio a Fidalgo. El español retuvo le puso pausa ante la tibia reacción de una línea de cinco que jamás otorgó garantías. Javairo se movió, el balón fue para el neerlandés, quien habilitó a Henry. La Bomba estalló en el momento preciso. Una media vuelta, con colaboración del arquero, adelantó al visitante. ¡Gol del América!.
