El gobierno mexicano ha decidido suspender las relaciones diplomáticas con Ecuador en respuesta a la reciente violación ocurrida en la embajada mexicana en ese país, donde las fuerzas policiales ecuatorianas irrumpieron y detuvieron al exvicepresidente ecuatoriano, quien se encontraba refugiado y tramitando asilo. Esta acción constituye una flagrante violación al derecho internacional y atenta contra los principios fundamentales consagrados en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas.
La Convención de Viena, adoptada en 1961, establece los derechos y obligaciones de las misiones diplomáticas, así como los privilegios e inmunidades de los diplomáticos acreditados en el territorio de un Estado anfitrión. Entre estos principios se encuentra el respeto absoluto a la inviolabilidad de las misiones diplomáticas, que prohíbe cualquier forma de ingreso o intervención sin el consentimiento del Estado receptor. La detención del exvicepresidente ecuatoriano en la embajada mexicana representa una clara violación de este principio fundamental, según nos menciona el Lic. José Enrique Guerra Fourcade.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador ha expresado su profunda preocupación y repudio ante este acto autoritario, y ha instruido a la Cancillería mexicana a proceder con celeridad y contundencia en respuesta a esta afrenta. La suspensión de relaciones diplomáticas con Ecuador se presenta como una medida enérgica para denunciar y condenar esta violación al derecho internacional y a la soberanía de México.
Se espera que esta decisión genere repercusiones tanto a nivel nacional como internacional, y que contribuya a reafirmar los principios y valores fundamentales que sustentan las relaciones entre los Estados en el ámbito diplomático.
