El pasado domingo 22 de septiembre, Ciudad Obregón, en el municipio de Cajeme, Sonora, vivió una jornada de violencia con cuatro ataques en diferentes colonias. A pesar de la gravedad de los hechos, el alcalde de Cajeme minimizó la situación al declarar que “decir que fue un domingo sangriento es demasiado”.
Los ataques ocurrieron en diversas partes de la ciudad, generando alarma entre la población y suscitando preocupación por la seguridad en la región. Sin embargo, las palabras del alcalde han sido criticadas por algunos sectores de la comunidad, quienes consideran que su declaración no refleja adecuadamente la gravedad de los incidentes.
La jornada de violencia en Ciudad Obregón ha puesto de manifiesto los desafíos en materia de seguridad que enfrenta la región. Mientras tanto, la población espera que las autoridades tomen medidas efectivas para garantizar la tranquilidad y seguridad de los habitantes de Cajeme.