Carlita pasó por un minucioso proceso de rehabilitación en la Reserva y Centro de Rescate Tatú Carreta, en Casa Grande
En un hecho inédito para la provincia, la Policía Ambiental liberó esta semana a un cóndor andino con un dispositivo de rastreo satelital en el Parque Nacional Quebrada del Condorito. La protagonista es “Carlita”, una joven hembra de siete meses que fue rescatada en julio en una vivienda rural de San Carlos Minas debido a un problema que le impedía volar.
Carlita pasó por un minucioso proceso de rehabilitación en la Reserva y Centro de Rescate Tatú Carreta, en Casa Grande. Allí, bajo el cuidado de especialistas, recuperó su capacidad para volar y fue equipada con un rastreador colocado en su espalda. Este dispositivo permitirá monitorear su desplazamiento, rutas de vuelo, velocidad, altitud, y los lugares donde se alimenta y descansa.
“El rastreo nos brindará datos esenciales para planificar acciones de conservación que beneficien tanto a la especie como a sus hábitats”, explicaron desde el equipo de liberación.
La reintroducción de Carlita al entorno natural no solo marca un paso importante para la preservación del cóndor andino, una especie emblemática y amenazada, sino que también representa un avance en el uso de tecnología para la conservación de la biodiversidad.
El Parque Nacional Quebrada del Condorito, elegido para la liberación, es un refugio natural ideal para Carlita y sus congéneres, ofreciendo un espacio protegido para que pueda reintegrarse a su hábitat.
Con este proyecto, se espera seguir sumando herramientas que fortalezcan la protección de una especie que simboliza la majestuosidad de los Andes.