Lo que comenzó como una escena digna de comedia terminó por convertirse en una historia de superación inesperada. En Garrafão do Norte, Brasil, un hombre llamado Isaque se ha robado el corazón de miles en redes sociales, luego de protagonizar un momento tan insólito como inspirador.

El pasado domingo, mientras se desarrollaba una carrera de 8 kilómetros organizada por una academia local, Isaque —visiblemente ebrio y calzado apenas con chanclas— decidió unirse espontáneamente a la competencia. Sin estar registrado y tambaleándose al principio, logró lo impensable: completar la carrera y, de paso, dejar atrás a varios corredores formales.
Aunque no fue reconocido oficialmente en el podio, los organizadores le otorgaron una medalla de participación, reconociendo la hazaña y el buen ánimo del momento. El hecho fue captado en video y, rápidamente, se volvió viral en redes sociales, donde internautas celebraron tanto su espontaneidad como su resistencia.
Pero la historia no quedó ahí.
El impacto del video le cambió la vida a Isaque: recibió ropa deportiva, calzado profesional e incluso apoyo odontológico por parte de negocios y marcas locales. Ahora, alejado del alcohol y con una rutina de entrenamiento más seria, se perfila como un símbolo de que los nuevos comienzos pueden surgir en los lugares y momentos más inesperados.
Lo que inició como una broma accidental, hoy se perfila como el primer capítulo de una posible historia de redención y disciplina.