Corren Rumores
Adiós el peluquín
Hilario Olea
HASTA LUEGO, SERGIO… Tras la excelente crónica biográfica que escribió nuestro amigo Antonio Duarte García de Sergio Romano, poco queda que agregar, salvo los detalles que lo pintan de cuerpo entero y no la imagen que presentó cuando llegó a Hermosillo en tiempo del gobernador Rodolfo Félix Valdés. Se dijo que en ese tiempo vino a Sonora por invitación del Chelele Arce Caballero, cuando menos ese era el rumor. Llegó como el buscabullas del barrio. Y se dio un tiro y un quien vive con los entonces adversarios del gobernador. No le temblaban las manos para hacer duras críticas y poner apodos a modo. Por suerte, como les hemos dicho, nosotros traíamos la recomendación de uno de sus amigos de estas tierras, el publicista Romero Carpena.
NO LO TRAGABAN… En un principio Sergio no se hizo querer por la raza, que le hicieron cierto vacío. Pero con el tiempo se le fue conociendo y dicho sea de paso, admirando por su enorme cultura y además, como dicen por aquí, se dieron cuenta que era gente. Una de las anécdotas de sobra conocida por estos lares fue cuando llegó, más o menos en primavera, luciendo su famoso peluquín ya de sobra conocido en televisión nacional. Cuando empezó la temporada de calor se aventó un Romanazo, al asegurar que en realidad no hacía calor en Sonora, que todo era mental. Hasta que le llegó el primer ramalazo de 45 grados de junio. Y en la madre. Eso no lo aguantó y en un alarde de buen humor mandó poner un espectacular por la calle Rosales en donde aparecía pelón, como al final lo conocimos, y puso “adiós al peluquín”. Y además se retrató con botas vaqueras. Ahí muchos nos dimos cuenta que tenía muy buen sentido del humor.
MUY CONOCIDO… Nos tocó viajar juntos y participar en un seminario de periodismo en Chihuahua y miren, vimos que era muy conocido. En la capital chihuahuense había o hay un tianguis conocido como “El Pasito” en referencia a que ahí vendían puras cosas gringas y chinas de El Paso. Pues andando por ese lugar, algunos de los encargados de locales se acercaron para saludarlo. Además, y miren que lo vimos, el Sergio tenía su pegue, porque luego luego le echaron los perros alguna dependientes. Y algo ligó, porque se me perdió de vista hasta el otro día. La otra que aprovecharon la relación fue cuando me nombraron director de Noticias, el cargo que tenía Sergio en Telemax. Ah, pues dijeron, le toca decirle que entregue el carro. Miren nomás que a todas margaritas. Pero con quien se enojó fue con el nuevo director de la televisora, Víctor Mendoza, con quien a la postre, y me consta, hubo gran amistad, al grado que ya tenían planes para un nuevo proyecto de comunicación que quedó en eso lamentablemente, en un buen sueño.
LEALTAD A TODA PRUEBA…Sergio sabía moverse muy bien en todas las esferas del poder. Pero cuando se definía y entrega su amistad, era totalmente leal, lealtades que mantuvo hasta el final y si alguna vez se dieron rompimientos no fue por su causa, sino por el interés de los políticos. Su estilo le hizo tener grandes amigos, pero al mismo tiempo, duros enemigos. Pero eso, nos consta, no le quitaba el sueño. Dejó su impronta con su reconocido espacio de la Agenda de Romano. Y sus rúbricas, que era la canción sonorense El Baile del Diablo o el tema de la película Casa Blanca. Y desde luego la frase del Principito con la cerraba sus participaciones. Ahora, solo queda enviarle el pésame a su familia y nuestro recuerdo al buen amigo. Y como pasa con los periodistas que no se entierran sino se siembra, un hasta luego.
SOLO FALTA TRES PATINES… No cabe duda que hay quienes buscan que la Suprema Corte de Justicia se transforme en la Tremenda Corte de Tres Patines. Porque hora sí que al presidente Andrés Manuel López Obrador le ganó el hibrys que lo afecta desde hace rato, y públicamente regañó a los magistrados de la Suprema Corte de Justicia que el dijo que había designado, cuando debió decir propuesto. Aceptó que se había equivocado porque los magistrados no responden a la voz del amo y están actuando con independencia y bajo criterio de la ley y no del capricho presidencial. En el colmo de la desfachatez acepta que “ya no están pensando en el proyecto de transformación”. Esto es, que ya no siguen la línea de la 4T por insensata que parezca y que otros obedecen lacayunamente. Caray, es la primera vez en la historia mexicana que a alguien lo regañan en público por hacer lo correcto y no lo que le ordenan.
SEPTIEMBRE MES DE PROMESAS…Se supone que la semana pasada quedó formalizado el sistema de salud IMSS Bienestar, el cual sustituye al fracaso INSABI, un ensayo que costó miles de millones de pesos y cientos de miles de muertes por el mal manejo de la pandemia de Covid. Ofrecieron entre otras promesas que el Hospital de Especialidades de Hermosillo estaría operando este mes y el plazo se acaba. Pero ya saben, igual patean el bote. Ya ven la cuatro carriles, ofrecieron terminarla en abril o mayo del 2019 y nanay. Veremos si septiembre no se vuelve solamente un simple mes de promesas. Total, eso no empobrece.
En fin, iniciamos semana y por ello no olviden lo que decía la Lichita Luján, prometer no empobrece y deja mucha lana. Sale.
