El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, agradeció el miércoles en Washington el apoyo estadounidense y recibió promesas de más ayuda, incluidos nuevos sistemas de defensa antimisiles, en su primer viaje al extranjero desde la invasión rusa en febrero.

Vestido con uniforme de combate marrón, Zelenski fue conducido a la Casa Blanca donde lo recibieron Biden y su esposa Jill y entraron juntos mientras guardias estadounidenses levantaban su bandera nacional y la de Ucrania.
“Vamos a seguir reforzando la capacidad de Ucrania para defenderse, en particular la defensa aérea”, dijo Biden a Zelensky sentados junto a la chimenea del Salón Oval.
Zelenski -cuya destreza para manejarse ante los medios y su actitud resiliente ante Rusia le ayudaron a sumar apoyos a la causa ucraniana- aterrizó en un avión militar estadounidense en la base aérea de Andrews tras un viaje organizado en secreto por razones de seguridad.
Tras reunirse con Biden, el presidente ucraniano hablará ante el Congreso, que está ultimando un nuevo paquete de 45 mil millones de dólares en asistencia para Kiev de cara a 2023.
Ante la llegada de Zelenski, Estados Unidos anunció otros mil 850 millones de dólares de fondos previamente presupuestados para Ucrania, incluido por primera vez el avanzado sistema de defensa antiaérea Patriot, capaz de derribar misiles de crucero y misiles balísticos de corto alcance.
Ucrania teme una creciente avalancha de misiles rusos y se ha enfrentado a una serie de ataques con drones, muchos de ellos comprados por Moscú a Irán. Fuerzas rusas bombardean centrales eléctricas y otras infraestructuras civiles justo cuando el país padece el invierno.
“Seguiremos apoyando a Ucrania el tiempo que sea necesario, para que Kiev pueda seguir defendiéndose y estar en la posición más fuerte posible en la mesa de negociaciones cuando llegue el momento”, declaró el Secretario de Estado Antony Blinken en el comunicado en el que anunció la ayuda.




















































