A pesar de que el Estado de México se mantiene en el color naranja del semáforo epidemiológico para medir la situación de la pandemia de COVID-19, la Comisión para la Protección de Riesgos Sanitarios (Coprisem), tuvo que suspender un Centro de Educación Integral, el cual ya se encontraba dando clases presenciales a seis niños.
Esto sucedió el viernes 9 de octubre en el municipio de Cuautitlán Izcalli, donde la escuela estaba operando a pesar de los acuerdos publicados por el gobierno de la entidad, cuyo fin es evitar la propagación del Covid-19. De acuerdo con los reportes de las autoridades, en el interior del inmueble los menores iban de tres a 10 años de edad.
La situación se dio a conocer después de que el Instituto de Verificación Administrativa del Estado de México (Inveamex) llevara a cabo un operativo en dichas instalaciones, donde también se comprobó que no cumplía con las condiciones sanitarias en las zonas de cocina y baños.
El personal de la Coprisem determinó colocar sellos de suspensión total de actividades, además de informar que este tipo de violaciones son parte de una falta penal, alentada por el contexto de emergencia sanitaria que se se sigue viviendo en el país.
