En México, el cáncer de mama triple negativo representa del 15 al 23% de todos los cánceres; sus principales características incluyen el hecho de afectar principalmente a pacientes menores de 50 años, de raza negra o hispana. Es uno de los subtipos de cáncer de mama que tiene mayor tasa de recurrencia y menor supervivencia libre de enfermedad, además, predominan las metástasis viscerales y de tejidos blandos a cerebro y pulmón (1) .
Pero, gracias a la investigación constante en la búsqueda de un tratamiento seguro y eficaz para este tipo de cáncer de mama, hoy más pacientes que viven con él tienen buenas noticias, ya que especialistas del Hospital Houston Methodist hallaron que la combinación de un fármaco utilizado para la insuficiencia cardíaca, en conjunto con la quimioterapia puede beneficiar a las mujeres con cáncer de mama triple negativo, lo que supone un avance potencial contra esta enfermedad difícil de tratar.
Los investigadores encontraron que la combinación de dos fármacos (el fármaco experimental L-NMMA y el fármaco aprobado docetaxel), reducía el tamaño de los tumores o hacía más lenta su propagación, de acuerdo con este estudio que está en etapa inicial.
“Este estudio sugiere que la combinación podría proporcionar un tratamiento más seguro y efectivo que los hoy existentes para el cáncer de mama triple negativo”, explicó la Dra. Jenny Chang, oncóloga médica de mama del Hospital Houston Methodist e investigadora principal del estudio. “Este tipo de descubrimientos son de suma relevancia para una enfermedad que, cuando es metastásica, sigue siendo en gran parte incurable”.
La Dra. Chang, quien además es la directora del Centro Oncológico del Hospital Houston Methodist, agregó que la combinación de L-NMMA y docetaxel representa “una forma efectiva de acortar el desarrollo del cáncer y llevar el tratamiento a los pacientes lo más rápido posible”. Señaló que el proceso tomó menos de cinco años y ahorró miles de millones de dólares.
El tratamiento combinado fue posible gracias a la investigación en el laboratorio de la Dra. Chang que investigó más de 500 posibles marcadores genéticos para el cáncer de mama triple negativo antes de encontrar variantes en un gen (RPL39), que impulsa la formación del tipo más agresivo de la enfermedad.
El cáncer de mama triple negativo, que representa aproximadamente el 15 % de los cánceres de mama, es una forma muy agresiva de cáncer reconocida por hacer metástasis rápidamente y volverse resistente a la quimioterapia. Su tasa de supervivencia a cinco años es del 76%, en comparación con el 90% de todos los cánceres de mama.
La enfermedad recibió su nombre porque sus tumores carecen de receptores de estrógeno y progesterona, así como de la proteína HER-2, lo que significa que las mujeres con cáncer de mama triple negativo no pueden beneficiarse de dos tipos de tratamiento que han transformado otros cuidados del cáncer de mama: terapias hormonales y medicamentos cuyo objetivo es la proteína HER-2.
Los pacientes que recibieron esta terapia combinada tuvieron una tasa de respuesta general de casi el 50%, en comparación con el 25 al 30% habitual en pacientes con la misma etapa de la enfermedad y que reciben el tratamiento estándar.
El ensayo de fase I/II no aleatorio y no ciego, el equipo involucró a un total de 35 pacientes con cáncer de mama triple negativo, 11 con enfermedad localmente avanzada y 24 con enfermedad metastásica. La mayoría de los pacientes no habían respondido bien a múltiples regímenes de quimioterapia.
Hasta el 80% de las participantes con tumores localmente avanzados en la mama y el 15% de aquellas cuyos tumores se habían diseminado a otras partes del cuerpo, respondieron positivamente al tratamiento combinado.
