
GABINETE EMPRESARIAL
Durante muchos años, el tema del apoyo al emprendedurismo se ha visto como un propósito no llevado a cabo de manera efectiva. Su impulso solo se ha quedado en momentos gloriosos y de satisfacción.
Pero hasta ahora no ha existido un esquema integral y permanente que permita que ese concepto, tan importante para una economía en vías de desarrollo como la mexicana, se consolide.
Porque la mayoría de las veces parece moda o propósito político el ayudar a los jóvenes talentos a desarrollar una idea. Después de tocar varias puertas y concurrir a varias ventanillas, algunos son apoyados.
Pero, ¿cuántos de esos apoyos existen en el país para proyectos exitosos que igualen a la promoción que se hace de todos los que se dice que se apoyan? Porque se reconoce que es necesario apoyarlos.
Sin llegar a integrar una legislación que impulse de forma efectiva y real ese propósito, que puede ser una importante base del desarrollo económico del país o de muchas ciudades.
Porque, de ser cierto que se ayuda de forma permanente y efectiva a todo emprendedor que quiera generar un proyecto a partir de una idea, México, desde hace muchos años, estaría en otro nivel.
Y todo ello se fundamenta en la realidad cotidiana que viven los jóvenes universitarios, técnicos y ciudadanos, quienes primero buscan ser escuchados en su propósito y después apoyados.
Después de recorrer entidades de gobierno e instituciones financieras, no encuentran eco, cuando en periódicos, revistas y anuncios televisivos se dice que las puertas están abiertas para ellos.
Cuando la realidad del emprendedurismo en la práctica cotidiana en el desarrollo del país es mínima, en comparación con las propuestas de proyectos que buscan emprendimiento y apoyo.
Desafortunadamente, esta es la realidad. Solo algunas organizaciones privadas y universidades logran apoyar este propósito, pero ha faltado más complementación de la iniciativa privada y pública.
Los destellos de algunos apoyos que se dan por parte de algunos gobiernos solo son para el momento fotográfico, cuando lo que se requiere es ir más allá de eso. Y solamente será viable con un plan integral.
Esta necesidad hoy hace más presente su impulso por las características de la política comercial que está presentando el presidente de los Estados Unidos, quien buscará continuidad en sus propósitos.
Porque no se puede hacer realidad el impulso al desarrollo económico del país, estado y municipio si no existe una entidad que impulse a los emprendedores con carácter público-privado.
Porque difícilmente se lograría integrar la innovación y el desarrollo tecnológico que pueden generar los emprendimientos que existen para diferentes áreas de necesidad en la sociedad.
El concepto del emprendedurismo no se puede ver nada más como un concepto fugaz, solo porque en otros países ha dado resultado y así se diga que en México se está al día.
Cuando en realidad es la base para que en el país inicie, de manera importante, el crecimiento y desarrollo económico con origen mexicano, entendiendo que es uno de los propósitos para que exista prosperidad.
No es algo nuevo buscar impulsar el emprendedurismo con financiamiento y con políticas públicas facilitadoras. Se legisla en otras cosas y se gasta igual, y seguimos en vías de desarrollo. Entonces, ¿qué esperamos?
