Los acontecimientos en la carretera a Bahía de Kino, donde fue desalojado un grupo de manifestantes que exigían la reposición de concesiones canceladas por reiteradas violaciones a la normatividad, tuvieron en las redes sociales diversas lecturas.
El error de un elemento de la Policía Estatal, que ya fue suspendido, sirvió para enderezar una campaña en la que se confundieron las verdades a medias con las medias mentiras; las mentiras completas y la tergiversación total de los hechos mediante imágenes ‘fake’ y versiones alarmistas que hablaban de muertos, acribillados a quemarropa, secuestrados y en general, todo lo que sirviera para magnificar los errores cometidos por la policía en el desalojo, que objetivamente terminó sin heridos más allá de raspaduras y jaloneos.
Desde luego, también para generar un clima de linchamiento contra la autoridad, que se atizó mediante una campaña bien orquestada por reconocidos militantes panistas y las mismas cuentas troll que vienen utilizando desde el sexenio pasado para el denuesto y la mentira.
De los orígenes y protagonistas del conflicto, de sus causas y proyecciones poco se habló.
En este espacio condenamos la violencia como vía para resolver conflictos. Pusimos en contexto el origen del conflicto y alertamos sobre la posibilidad de que la provocación se convierta en una práctica política de una oposición panista muy diezmada, pero que no termina de lamer sus heridas tras la derrota en su efímero paso por el poder sexenal.
Hubo quienes quisieron forzarnos a replicar mentiras, como esa del acribillamiento a quemarropa de los manifestantes, y en caso de no hacerlo, pasaríamos como cobardes y mentirosos.
No. Aquí lo dijimos bien claro desde el viernes pasado y fuimos los primeros en hacerlo: nada justifica la violencia y el uso excesivo de la fuerza. Tampoco la diatriba y la calumnia para alimentar venganzas políticas, sumándose a un coro atizado por profesionales de la desinformación.
Las redes son un espacio propicio para eso. Afortunadamente hay suficiente criterio en la mayoría de los usuarios para discernir entre una cosa y otra. Y entre los que no hay criterio, pues que con su pan se lo coman, porque finalmente esto es de opciones de información y cada quién elige las suyas.
II
Bien cobijado y mejor reconocido se vio el alcalde de Hermosillo en la ciudad de Toluca, a donde acudió para rendir protesta como presidente de la Federación Nacional de Municipios de México, la organización de alcaldes más grande de todo el continente americano y desde la cual se proyectan reformas necesarias en materia de federalismo hacendario, autonomía municipal, gestión de recursos y adaptación al Nuevo Sistema de Justicia Penal.
Al filo de las 10 de la mañana comenzaron a llegar presidentes municipales de todas partes del país para atestiguar el relevo de mandos en esta organización, que deja el alcalde de Xalapa, Américo Zúñiga Martínez, y la batería pesada la integraron Roberto Ramírez de la Parra, director General de la Comisión Nacional del Agua; el gobernador de Hidalgo, Omar Fayad Meneses, que a su vez es presidente del Consejo Consultivo de la Fenamm y el gobernador anfitrión Eruviel Ávila, así como el representante del presidente Enrique Peña Nieto, el secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong.
La presidencia de la Fenamm no es un asunto menor, considerando que agrupa a casi dos mil ediles del vasto territorio nacional, y, aunque todos tienen una problemática común en cuanto a su relación con el gobierno federal y los estatales, cada uno de ellos tienen agendas particulares en materia de gestión, obras y acciones.
No es tarea fácil, además, porque los Ayuntamientos son el primer contacto de los ciudadanos con el gobierno y desde hace algunos años la política presupuestal de la federación ha sido rediseñada pero no para favorecerlos, sino para escatimar recursos que, en época de crisis, acrecientan las demandas de los ciudadanos que los reclaman precisamente en las ventanillas municipales.
“Es por México que estamos aquí para renovar estrategias, restablecer prioridades y fortalecer alianzas con nuestros estados y con la federación, pues todos somos corresponsables en la mejora continua de la calidad de vida de la gente”, subrayó el Maloro Acosta en su discurso de toma de protesta.
En él, citó cuatro grandes ejes que serán la base de su plan de acción al frente de la Fenamm, comenzando por la insistencia en un federalismo hacendario más equitativo e impulsar ante el Congreso de la Unión la modernización del marco legal que hoy rige a los municipios.
Así también fortalecer ese frente municipalista para la gestión de respuestas prontas a temas prioritarios como la eliminación de numerosas exenciones, el ordenamiento y regularización del espacio público, movilidad, paisaje urbano, entre otros.
Ante el representante de la presidencia de la República, el Maloro llamó a no temer abrir el debate en torno a la nueva delimitación de responsabilidades entre los tres niveles de gobierno, asumiendo cada quien las suyas, para integrar una agenda municipalista común, ampliar facultades y áreas de responsabilidad de la autoridad municipal y precisar las áreas de concurrencia con los otros niveles de gobierno.
Hizo una mención especial al estado en que se encuentra la implementación del Nuevo Sistema de Justicia Penal, y recordó que ha llevado al Congreso de la Unión una propuesta para reformar el Código Nacional, pidiendo un periodo de transición entre lo viejo y lo nuevo, ya que actualmente, en la práctica, la modernización legal en ese rubro se percibe más como fomento a la impunidad, sobre todo en lo que se refiere a los delitos patrimoniales.
En resumen, sostuvo, “vamos por la ejecución de nuevas y efectivas fórmulas para fortalecer la gobernabilidad, la confianza y soluciones a la gente, que exige con justa razón, respuestas y más inversiones para mejorar la calidad de vida de sus familias”.
Sorprende la familiaridad con que los funcionarios federales se refirieron al alcalde de Hermosillo, aunque no tanto, considerando su paso por la cámara de diputados (donde compartió curules con Omar Fayad, por ejemplo), y otros cargos en el gobierno federal, pero aludieron a él por su apodo y tuvieron palabras de reconocimiento.
III
Y para despejar dudas en torno a una andanada reciente que se dejó sentir por parte de adoloridos padrecistas que ya veían en el amparo otorgado por un juez federal al ex gobernador de triste memoria, su liberación, ayer les echaron un balde de agua fría.
La gobernadora Claudia Pavlovich Arellano tomó protesta a Rodolfo Montes de Oca Mena como Fiscal General de Justicia de Sonora, una nueva figura creada precisamente en el marco del Nuevo Sistema de Justicia Penal y el Sistema Nacional Anticorrupción, para dotar de personalidad jurídica y patrimonio propio a la Procuraduría, lo que en síntesis quiere decir: mayor autonomía respecto del Poder Ejecuivo.
La reforma para la creación de la Fiscalía General del Estado incluye regular la actividad del Ministerio Público y las atribuciones que tendrá la Agencia Ministerial de investigación Criminal (AMIC), actualmente conocida como Policía Estatal Investigadora.
La toma de protesta de Montes de Oca Mena como Fiscal General del estado, va más allá de la forma; es un mensaje claro en el sentido de que la legislación en la materia, propuesta por la gobernadora desde los primeros meses de su gestión, que también creó una instancia de combate a la corrupción, denominada formalmente Fiscalía Especial Anticorrupción que ayer recibió otro espaldarazo garantizando su vigencia.
Destacable la presencia del diputado del PAN Moisés Gómez Reyna y el integrante del Consejo Estatal de Seguridad Pública, José Coppel Luken, así como el coordinador parlamentario del PRI, Epifanio Salido Pavlovich.
IV
Donde también se registran movimientos interesantes es en el sector educativo, cuyo titular Ernesto de Lucas Hopkins reunió a todo su equipo de colaboradores para participar en la Cumbre Educativa Sonora, a la que asistieron también autoridades estatales y federales de Hacienda e Infraestructura, así como dirigentes sindicales y legisladores.
El sector educativo es, a no dudarlo, uno de los que más se vieron afectados por la depredación sexenal del padrecismo y para sacarlo del hoyo se tienen que redoblar esfuerzos y optimizar recursos, lo que deberá traducirse en una mejor infraestructura y más alta calidad académica.
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