En Cajeme, sólo el PRI podría vencer al PRI.- Tiene Gilberto Gutiérrez los elementos en sus manos para construir los puentes del triunfo en Sonora, durante el 2018.- En política, la forma es fondo
Bernardo Elenes Habas
Gilberto Gutiérrez Sánchez será el presidente efectivo del PRI en Sonora, luego de haber cubierto interinato a la dirigencia de Alfonso Elías Serrano desde septiembre de 2015, cuando éste se incorporó a la gerencia nacional de FIRCO.
Llevará como secretaria general, por supuesto, a Andrea de la Mora, binomio que, después de su registro formal ante la Comisión de Procesos Internos como planilla única, cumpliendo requisitos estatutarios, espera fecha para la toma de protesta.
No hay duda que la estructura nacional y estatal del Revolucionario Institucional depositaron toda su confianza en Gilberto, quien tiene en su haber el conocimiento del actual tejido priísta porque lo ha vivido a plenitud, contribuyendo a fortalecerlo en los dos años que lleva navegando al frente del mismo, lo que le permitirá tomar decisiones claves y profundas para el proceso electoral del 2018.
Y, apelando al axioma de Jesús Reyes Heroles, en el sentido de que en política lo que es forma es fondo, es notorio que será la asignatura que deberá aprobar con mención honorífica Gilberto, en base al mapa político, humano y moral que posee del activo partidario. O bien, reprobarla inevitablemente, si no apela a sus conocimientos y sensibilidad, y permite que lo arrastren intereses de grupos, que, ciertamente en el tricolor son bastante, y todos cargados de ambiciones calculadas al corto, mediano y largo plazo.
Tendrá, pues, Gutiérrez Sánchez, que defender la legitimidad de candidatos futuros en la Entidad, para que las premisas partidarias no caigan en contradicciones, y por supuesto, no manchen la filosofía colosista, donde se establece que en el PRI no deben prevalecer ya candidatos que al ser postulados “los primeros sorprendidos en conocer su militancia seamos los propios priístas”, como expresó en su memorable discurso del 6 de marzo de 1994, Luis Donaldo.
Las elecciones del 2018 se constituyen en la principal tarea de Gilberto, y aunque todo indica que el PRI será el partido a vencer en los próximos procesos, también es evidente que la gran lucha será de PRI contra PRI, misma que representa la más perversa, por oculta y llena de sombras, de todas las batallas.
Hay municipios, como Cajeme, donde por dos procesos seguidos el PRI ha logrado carro completo, y será, quizás, donde el dirigente tendrá que utilizar todas sus capacidades, porque su mismo partido podría auto devorarse, quedando debilitado y a merced de otros institutos, de no escuchar la voz de la ciudadanía, la sabiduría del pueblo, y dejando los hilos de las decisiones sustantivas en las conveniencias ciegas de los grupos.
Como nunca, el PRI tiene candidatos para escoger si acierta a utilizar saludables ejercicios democráticos, tanto para la senaduría, diputaciones federal y locales, y por supuesto la alcaldía. El gran reto, la gran empresa político-electoral que deberá enfrentar Gilberto es repetir por tercera vez el carro completo. Las condiciones objetivas y subjetivas están dadas, y no es porque me atraigan los monopolios, sino que se trata del análisis frío de una realidad socio-política innegable en la región, donde la izquierda no se ve, como afirma el licenciado Alejandro Mungarro; y la derecha no puede salir de la espantosa herencia de corrupción que les heredó Guillermo Padrés y sus colaboradores.
Entre el activo con que cuenta el PRI en Cajeme para futuros cargos de representación federales y locales, crecen nombres y acciones de personajes como Rogelio Díaz Brown, Faustino Félix Chávez, Eduardo Bours, Miguel Ángel Murillo, Ricardo Bours, Adrián Manjarrez, Denisse Navarro Leyva, Armando Alcalá, Marcelo Calderoni Obregón, Emeterio Ochoa Bazúa, Raúl Ayala González, Kiki Díaz Brown, Brenda Jaime, Abel Murrieta, Omar Guillén, Rolando Cruz, Mario Alberto Guerra, Alida María Parada, Martha Luz Parada Velderrain, José Enrique Guerra Fourcade, Regino Angulo Rodríguez, Ramón Villegas Leyva, Cristóbal Blancas Virgen, Lourdes Portela, entre un cúmulo de nombres que son parte del priísmo activo, con obra y con huella.
En Cajeme, pues, de acuerdo a la forma y fondo del aforismo reyesheroliano, sólo el PRI podría vencer al PRI.
Le saludo, lector.