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“Una ratoncita se encontraba de la mano de un murciélago; le comenta a su amiga ratona –Te presento a mi novio; es piloto aviador” Del argot popular.

LO CLARO. El Observatorio Laboral, estima que México acumula una fuerza trabajadora igual a 43 millones de personas como Población Económicamente Activa PEA.

De estas, 4.9 millones son profesionistas. Hablar en los 70’s sobre el mismo tenor, significaba quizá el 10% de profesionistas en comparación con los que hoy ejercen.

Sin embargo, nunca será suficiente para el mercado de la competitividad global que demanda más preparación y especialización.

La mayor presencia de nuestros jóvenes egresados, las podemos encontrar (según la misma fuente) en actividades como la docencia, que reclaman incrementos constantes en la presencia de formadores capacitados. Y en la menor escala, se encuentran actividades como el diseño y el urbanismo.

Por eso es destacable reconocer a quienes continúan en el camino de la preparación y contribuyen a fortalecer la columna vertebral del desarrollo económico del país.

En Tamaulipas, la Universidad Autónoma de Tamaulipas egresa a 150 nuevos licenciados de la facultad de derecho y ciencias sociales en distintas ramas. Dinamo generadora de progreso es la educación, que con su contribución de más profesionistas al mercado laboral hará factible el ideal de ser competitivos para la atracción de riqueza. Enhorabuena.

LO OSCURO. Y aquí, la antítesis.

Ñoquis es un plato argentino, elaborado a base de pasta italiana y que por costumbre lo consumen una vez por mes, preferentemente a finales del mismo.

Y tal mote les ha fincado a quienes teniendo una plaza laboral, acuden solo en los días de cobro. Algo a lo que los mexicanos llamamos aviadores.

Un espanto coloquial recorre al pueblo argentino, toda vez que se enteran que en el Congreso de su país se detectaron cerca de 200 aviadores –ñoquis- de una base laboral de poco más de 5 mil empleados de la Cámara Baja.

Con duros golpes de pecho, también encontraron que en el Senado la cifra superaba los 700. Tal cosa.

Proponemos ejemplificar unos botones de muestra.

62.5 millones de pesos –solo en 2016- detecto la Auditoria Superior de la Federación en el Estado de Morelos (de Graco Ramírez) por concepto de daño al erario por ‘aviadurias’.

“Las 44 mil plazas irregulares que detectó la Auditoria de la SEP en reciente investigación, son utilizadas por regidores, presidentes municipales, diputados locales y federales” manifestaron líderes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación CNTE. El equivalente a 5 mil millones de pesos al año según Aurelio Nuño, entonces titular de la SEP.

Esto se está poniendo bueno…

Simón Vargas, secretario de gobierno de Hidalgo, habla de una depuración nominal cercana a las 3 mil plazas, de las cuales 300 ya fueron despedidos precisamente por su injustificación a permanecer en dicha nómina.

El Presidente de la Junta de Coordinación Política Local de Tamaulipas, diputado Carlos García González estimo en “al menos 5 mil aviadores en la pasada nomina estatal que dejo al estado en ruinas”.

No; no tendríamos un numero certero del daño causado al erario público en esta figura laboral que demerita las arcas de las contribuciones vía impuestos.

Pero si sabemos bien, que es otra de las causales por las que la ciudadanía tiene una permanente desconfianza del proceder de quienes les gobierna.

Las medidas se toman poco a poco y deberá demostrarse la culpabilidad de quienes torcieron el ejercicio público.

En Sinaloa se presentó ante el congreso local la iniciativa para castigar con cárcel tanto a los aviadores como a los que permiten y contratan a esta figura parásita del sistema.

COLOFON. Por fin les ganamos a nuestros hermanos argentinos. Ellos, sencillitos reclaman 900 aviadores. Y los mexicanos poseemos sin duda, la real fuerza aérea ñoqui del planeta…

 

alejandrodeanda@hotmail.com

@deandaalejandro

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