Poema de domingo.- Bajaron de la sierra las palabras, se volvieron poemas. En ellos veo tu rostro, tu figura morena. Me subyuga tu risa, tus silencios oscuros y esa pasión que tienes por las cosas pequeñas, sueños que son tus alas, magia con la que vuelas sembrando la esperanza, el amor más sencillo, plural como una espiga…
Bernardo Elenes Habas
Tus manos breves tienen
sol y luna y nostalgia,
huelen a harina fresca,
a leña de mezquite,
a limpia agua del río
que baja de la sierra.
Tus manos desconocen
esencias de farmacia,
porque de día trabajan
en el campo,
en la ordeña,
acarician las aves,
cuidan las flores rojas,
y en la hornilla de barro
donde crepita el mundo,
preparan wakabaki,
tájkarim, café caliente,
mientras tus ojos negros
se clavan en los míos
diciéndome en silencio
que la brisa de otoño,
que el murmullo del agua,
que la luna dorada,
que la sierra, el cielo,
las brillantes estrellas,
son para mí esta noche…
como tu cuerpo ardiente…
—-o0o—-