Poema de Domingo.- En la soledad de la noche, en el valle, en la sierra, cuando sopla el frío del invierno, la magia de la poesía, inexplicable y envolvente, reclama su lugar en el tiempo.
Tiende puentes y andamios hacia lo desconocido, y un rayo de vida conecta pensamientos, tocando con su luz a los seres. Confiriéndoles magia para crear y contagiar belleza, amor, arte. Bebiendo las vibraciones escrituradas en el pizarrón del horizonte, en la voz líquida de ríos y mares, en los arpegios del viento que aroma de guitarras la fronda de los árboles, recorriendo distancias, propiciando el reencuentro…
Bernardo Elenes Habas
REENCUENTRO
Desde el sur de tu vida,
con la ventana abierta,
Miras las alas tristes
con que vuela
el invierno
arrastrando las hojas
y los pétalos muertos
de sauce y bugambilias
en el jardín
que bebe el agua
de tus ojos…
Repasas los poemas
que bajan de la sierra
olorosos a estrellas,
a pasado y presente,
como si el viento norte
brotara de tu pecho,
flor azul de nostalgias…
El tiempo se adormece
con tu risa lejana,
cantan con voz yoreme
los versos que lavaron
sus verbos sensitivos
en las aguas benditas
del caudaloso Yaqui.
Río de mis mayores
donde baño mi alma
para poder decirte,
que la brisa nocturna
reaviva mi fogata
y tu nombre sencillo
anida en mi guitarra…
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