Ayer se dio el primer encuentro de gobernadores de Sonora, la constitucional y el electo, Claudia Pavlovich y Alfonso Durazo, respectivamente.
El objetivo, hacer el primer contacto presencial para iniciar el proceso de entrega recepción, para lo cual ya se han integrado los equipos en cada una de las partes y el próximo martes en Palacio de Gobierno se llevará a cabo la instalación formal de la llamada Comisión Mixta.
En sus cuentas de Twitter, ambos gobernadores mostraron buena disposición para avanzar en este protocolo sexenal, de manera ordenada y transparente.
Se sabe que por parte del gobierno estatal ese equipo lo encabezará el secretario de Hacienda, Raúl Navarro Gallegos, y por parte del gobernador electo estos trabajos los comandará Francisco Acuña Méndez.
De Navarro Gallegos no hay mucho que decir que no se sepa: es un experimentadísmo funcionario público que durante más de 30 años ha ocupado diversos cargos en el gobierno estatal y federal; en la Cámara de Diputados Federal, así como en empresas privadas.
Contador Público de profesión, quizás su primer cargo de relevancia fue en el sexenio de Manlio Fabio Beltrones, como secretario de Hacienda, si la memoria no falla.
Acuña Méndez por su parte, es un hombre de todas las confianzas del gobernador electo. Lo acompañó en la secretaría de Seguridad Pública federal como su coordinador de asesores y desde allí lo impulsó para ocupar la secretaría General del Centro Nacional de Inteligencia, el organismo que en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador sustituyó al ex temible CISEN, nada más y nada menos que las instancias donde se recoge y procesa toda la información política del país.
En los archivos del CISEN (Centro de Inteligencia y Seguridad Nacional) se encuentran todos los archivos con los expedientes de cada protagonista de la vida pública en el país, especialmente los de personajes que en su momento fueron opositores al gobierno y hoy lo ejercen.
El CISEN tenía fama de ser un organismo de inteligencia bastante oscuro, con agentes infiltrados por todos lados, aunque en los últimos años de los gobiernos del PRI y el PAN ya contaban hasta con reporteros que entraban a las ruedas de prensa como Pedro por su casa, tomaban nota y hasta hacían preguntas y se acababan las galletas y el café como cualquier otro.
Al tomar el cargo en el CNI, Acuña Méndez fue criticado por no acreditar experiencia en la materia, pues su formación tiene que ver con otras áreas; de hecho hasta unos años antes presidía una empresa con sede en Washington, In Trust Global Investments, relacionada con el uso de energías renovables y su aplicación en comunidades rurales y urbanas de América Latina, aunque recientemente hizo una especialidad en Seguridad Nacional en el ITAM.
Como dato más conocido, es hijo del prestigiado abogado sonorense Francisco Acuña Griego, cuya carrera como académico, litigante, político y funcionario público estuvo siempre ligada al PRI. Incluso fue procurador de Justicia con Samuel Ocaña García, a quien Alfonso Durazo considera como el último de los gobernadores con una visión más social y un ejercicio más honesto en el poder.
Por otra parte, puede parecer una sorpresa que en el equipo de entrega recepción por parte del gobernador electo participe también el dirigente estatal del PVEM, Omar del Valle Colosio, pero no lo es tanto. El muchacho es otro ‘yuppie’ en la acepción de ese acrónimo como Young Urban Professional, con el que se alude a ciertas personas que han rebasado el nivel de clase media aspiracionista, tan de moda en estos días.
El señor es egresado del Tec de Monterrey y tiene una maestría en políticas públicas por la Universidad de Georgetown; cuanta con certificaciones en planificación local para el desarrollo, y en políticas públicas por el Instituto de Desarrollo Rural de la India y de la Universidad de Harvard y entre otras cosas, ha colaborado con el Banco Mundial y ha ocupado cargos clave en grandes empresas y en el gobierno federal.
La sorpresa en todo caso, es que no aparezca en el equipo de Durazo alguien del PT o del PANAL, que también fueron sus aliados en la pasada contienda. O quizás sí aparezcan pero aún desconocemos sus identidades.
El punto es que las cabezas de los equipos de entrega-recepción en el plano estatal ya están listas y el próximo martes veremos a todos lo coequiperos un uno y otro lado de la mesa.
Donde no termina de salir humo blanco sobre este tema en es el ayuntamiento de Hermosillo, donde como se sabe, la alcaldesa con licencia Célida López mantiene impugnada la elección, impugnación que habrá de dirimirse en el tribunal federal electoral, sin que esto obstaculice el proceso de entrega-recepción que deberá darse el próximo 15 de julio.
El alcalde electo, Antonio Astiazarán ya envió la semana pasada un oficio al alcalde interino, Fermín González Gaxiola para que proceda a integrar su equipo, ya que de parte del guaymense tiene todo listo para iniciar el proceso, y sin detenerse, continúa reuniéndose con diversos actores del mundo de las finanzas, el gobierno y las empresas.
Ayer por ejemplo, se reunió con el presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), Alfonso Reina Villegas para refrendar que en su plan de gobierno se incluyen proyectos para el crecimiento de Hermosillo, sobre todo los relacionados con la reactivación de los espacios públicos y el saneamiento de calles y avenidas.
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