
En un movimiento que podría transformar radicalmente la manera en que se crean las leyes, Emiratos Árabes Unidos (EAU) se ha convertido en el primer país del mundo en utilizar inteligencia artificial (IA) para redactar, revisar y modificar sus leyes federales y locales. Este innovador sistema, supervisado por la recién creada Oficina de Inteligencia Regulatoria, marca el inicio de una era donde los legisladores podrían ceder gran parte de su trabajo a las máquinas.
Con esta decisión histórica, las autoridades de EAU buscan agilizar y optimizar el proceso legislativo. Se estima que el uso de IA permitirá acelerar en un 70% la creación de nuevas leyes, reducir los costos gubernamentales en un 50%, y aumentar el Producto Interno Bruto (PIB) nacional en un 35% para el año 2030. La IA no solo se limitará a redactar leyes, sino que también monitoreará su impacto y sugerirá modificaciones o actualizaciones de manera periódica.
La apuesta de Emiratos va más allá de la eficiencia: con la IA al frente del proceso legislativo, el país pretende garantizar que las normas se mantengan actualizadas ante el vertiginoso avance de la tecnología y los cambios sociales. En lugar de depender únicamente de los tiempos y prioridades humanas, las leyes podrán evolucionar al ritmo que las circunstancias demanden.
Aunque la figura del legislador tradicional no desaparecerá de inmediato, esta iniciativa plantea una pregunta inevitable: ¿estamos ante el futuro de la política sin políticos? Al menos en Emiratos Árabes Unidos, la respuesta parece estar cada vez más cerca.
