Bastante ilustrativo lo expresado hace un par de días por el auditor superior de la federación, David Rogelio Colmenares en el sentido de que en el ejercicio de sus funciones, evitaba asistir a eventos públicos en su estado, Oaxaca, debido a que esa entidad estaba reprobada en todos los rubros relacionados con la transparencia, la rendición de cuentas y el uso responsable de los recursos públicos.
Si hace cuatro años el señor Colmenares hubiera ocupado ese cargo y aunque no es de aquí, también evitaría llegar a Sonora, que estaba convertida en una verdadera zona de desastre en materia de infraestructura carretera, hospitalaria y educativa (¿se acuerdan de las carreteras en los valles del Yaqui, del Mayo, en la sierra; de los hospitales donde los pacientes se tiraban de las camillas y de los chavitos recibiendo clases debajo de los árboles?).
Y todo eso no era más que el reflejo de lo que finalmente se tradujo en más de 30 mil millones de pesos (¡30 mil millones de pesos!) del presupuesto público cuyo destino nunca se pudo explicar, pero detrás del espejo aparecía la comalada de nuevos millonarios, varios de ellos perseguidos, encarcelados, en libertad condicional o de plano, aún a salto de mata.
Quizás la desmemoria, que suele ser mala consejera, o la conveniente mala fe, que suele tener el color del oportunismo, no permitan apreciar lo que se ha avanzado en áreas donde la calificación de las instancias fiscalizadoras y evaluadoras ubicaba a Sonora en los últimos lugares a nivel nacional.
Hoy, el ínfimo monto de los recursos observados por la ASF puede ser un parámetro para asumir que en general, las cosas se están haciendo bien, con todo y que persisten rezagos importantes y deficiencias no superadas sobre todo en aquellas áreas donde el saqueo fue de escándalo (como el fondo de pensiones del Isssteson).
Pero, sin la venda de la mezquindad sobre los ojos, resulta evidente lo alcanzado en materia de estabilidad laboral y política; incremento en la inversión productiva y desarrollo de nuevos proyectos; relanzamiento de políticas públicas en materia de equidad y de igualdad de género, con 26 presidentas municipales, 46 síndicas y 234 regidoras, así como la primera legislatura que tiene una representación prácticamente de 50/50 entre hombres y mujeres.
¿Asignaturas pendientes? Desde luego quedan varias y lo interesante será ver cómo las saca adelante en un contexto nacional inédito en la correlación de fuerzas políticas y los nuevos criterios para la asignación de recursos federales, donde a Sonora no le ha ido del todo bien al cercenársele más de mil 600 millones de pesos en su presupuesto.
Pero por ejemplo, algo que traía bastante nerviosos a los sonorenses era la tardanza en firmar el convenio para respetar el convenio mediante el cual se subsidian las tarifas eléctricas en Sonora, una negociación que la gobernadora inició desde hace un par de meses y que ya arrojó resultados positivos.
“Lo que está no cambia”, expresó el presidente Andrés Manuel López Obrador sobre este tema, con lo cual se asume que el subsidio a la tarifa seguirá vigente en los 72 municipios de Sonora (algo en sentido contrario sería una locura considerando los implacables veranos en el estado).
Ya nomás falta ver cómo se definen las reglas de operación del fondo minero, porque redireccionar esos recursos hacia programas asistenciales dejarían a algunos municipios que recibían más recursos de este fondo que del propio presupuesto federal y del estatal, sin capacidad para invertir en obra pública.
II
Pues por fin llegaron los camiones recolectores de basura que vendrán a restablecer el servicio dos veces por semana en Hermosillo, tal y como se prestaba en la administración pasada.
Buen punto para la alcaldesa Célida López el de desoír las voces que le sugerían como buena la idea de utilizar dichos camiones como vehículos de propaganda partidista, rotulándolos con los colores institucionales de Morena y no del Ayuntamiento, como ordena un acuerdo de Cabildo, pero además, como ordena el sentido común.
Lo mejor de todo es que se restablecerá un servicio que colapsó en los últimos meses y sobre el cual se tuvieron que tomar medidas emergentes, como la colocación de contenedores en diversos puntos de la ciudad, con lo que quizás se evitó una crisis de salud que podría haber estallado si la gente siguiera acumulando su basura doméstica a lo largo de toda una semana, recurriendo a medidas un tanto bizarras como congelar sus desperdicios.
Queda para el debate, la viabilidad en el largo plazo del llamado arrendamiento puro según el cual esos camiones serán pagados a casi el doble de su valor factura, con la opción de quedarse con ellos dentro de dos años, cuando probablemente su vida útil se haya agotado.
Por lo pronto, creo que las familias hermosillenses agradecerán que el servicio se vuelva a prestar dos veces por semana.
III
Nomás no se enfría el proceso sucesorio en la Unión Ganadera Regional de Sonora. Al contrario, cada vez sube más la temperatura política en vísperas de la celebración de la asamblea de la unión local del Valle del Yaqui, acaso la más grande después de la de Hermosillo.
Ayer, el aspirante a suceder a Héctor Platt Martínez, Daniel Baranzini Hurtado hizo circular una carta enviada a los dirigentes de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas, Oswaldo Cházaro Montalvo y Homero García de la Llata, inconformándose y exigiendo que dejen de intervenir en el proceso local, ya que carecen de facultades para ello, expone.
Cuestiona además un escrito de dichos dirigentes en el que sostiene que las asambleas que se están llevando a cabo tienen sólo carácter de informativas emitir un voto a favor de determinado aspirante, dejando esa decisión en poder del delegado. Sin embargo, asegura Baranzini en su escrito, como en todos los organismos colegiados, en las asociaciones ganaderas el máximo órgano de representación es la asamblea general.
Las partes han entrado en una disputa sobre la normatividad interna para los procesos electorales, pues la actual dirigencia asume que efectivamente, son los delegados ya nombrados quienes llevan el voto a la asamblea general (el relevo de dichos delegados deberá darse una vez que se elija al nuevo presidente), tal y como se ha venido haciendo desde que existe la UGRS.
Un ganadero consultado por esta columna aludió a esta disputa y sostuvo que Baranzini y su gente “sólo andan buscando arrugar lo que ya está planchado”.
Lo cierto es que la sucesión se está polarizando demasiado con la intervención de diferentes fuerzas políticas y ya entraron a la disputa los dirigentes nacionales, a quienes exigen se abstengan de tomar parte, influir y opinar en la elección del nuevo Consejo Directivo de la UGRS.
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