Fake news, rumores, hechos verdaderos y percepciones divulgadas a través de redes sociales o por la forma más efectiva, mediante la comunicación oral, han convertido a Sonora en estos días en una plaza muy caliente, parafraseando la jerga policiaca y la nota roja tradicional.
Que integrantes de convoy de sicarios sitió Magdalena y se pasea retador en Nogales; en Hermosillo atentan en contra de alto, pero de inopinado bajo perfil, jefe policiaco municipal y a los perpetradores les sale el tiro por la culata; militares matan a dos jóvenes en Carbó; siguen ataques a balazos en plena vía pública y a plena luz del sol o en lo oscurito, y así, en un contexto intimidatorio para la gente decente de Sonora, que no por ser la inmensa mayoría, encuentra consuelo por así ser.
Ya no encuentra uno para dónde voltear ni a quien creer, optando a fin de cuentas por la prudencia y procurando mantener la distancia de presuntas áreas de riesgo, destacando la permanente desazón y preocupación por familiares y amigos frente a lo aleatorio que debe ser el quedar en medio de fuego cruzado entre bandas del narco o de estos con autoridades policiacas.
Lo más irónico de esta escalada a lo largo de esta semana, es que la violencia arrecia luego de que el titular de seguridad pública federal alardeara que ya fue contenida la embestida criminal y que de aquí para adelante ya vamos de gane, con el agregado de sus cuentas mañosas expuestas ante senadores de MORENA para fundamentar sus alucinaciones.
Difícil la chamba que realiza el titular nuestro de dicho rubro, David Anaya Cooley, cuyas estrategias en favor de la seguridad de los sonorenses se topa con la parsimonia de la instancia federal y la selectiva y ocasional actuación militar y las complicidades evidentes en direcciones de seguridad pública municipios, multiplicando sus esfuerzos para al menos mantener a la baja delitos patrimoniales.
Las cosas están de la fregada y conforme pasa el tiempo se comprueba la urgente necesidad de que el gobierno federal no ponga todos los huevos en la canasta ni apueste solamente con ir a los orígenes de la delincuencia y alta capacidad de reclutamiento de bandas del crimen organizado mientras descuida y es timorato y pusilánime con los efectos de ahora.
Miren, la impunidad es el mejor y mayor aliento para jóvenes en comparación de los tres mil 600 pinchurrientos pesos que se les regalan al mes para disuadirlos de caer en la tentación por lo que suponen altos ingresos en el sicariato y por eso, en el abundante material gráfico que se divulga con motivo de sus acciones, son jóvenes en mayor medida quienes lucen pavorosas armas de grueso calibre.
Eso de ir a los orígenes de las conductas antisociales mediante el combate a la marginación de servicios de gobierno; promover la generación de empleos bien pagados; acercar la oferta educativa a clases populares; fortalecer valores y la integración familiar, son banderas tradicionales de todas las instancias de gobierno, pero avanzar en ese objetivo es de orden generacional, de esfuerzo sostenido y de largo aliento, contrario a los idiotas de la 4T que creen que como por arte de magia y en lo inmediato se verán los resultados.
Y mientras tanto, propician impunidades con sus omisiones y sus fallidos operativos; con invenciones e improvisaciones como lo es la Guardia Nacional y la militarización de mandos en las áreas de seguridad pública de los municipios y ni modo que desmientan que en Hermosillo, Guaymas, Empalme, Cajeme y Navojoa las cosas no han empeorado desde que con engolada voz, Durazo Montaño anunció a uniformados de alta graduación para ocupar dichas posiciones.
Lo ocurrido en Hermosillo con el atentado en contra del alto jefe policiaco aludido, deja ver que el general Gilberto Landeros Briseño no tiene los hilos más importantes para un mejor desempeño de su trabajo y que ignora demasiado sobre cómo se las gastan sus subordinados; peor el caso del comisario en Guaymas, el capitán de fragata Andrés Humberto Cano Ahuir, convertido simplemente en el guarura personal de la alcaldesa Sara Valle Dessens.
Pero si a esas vamos, Cajeme se los lleva de calle, ya que como se sabe, a pesar de la presunta autoridad de Durazo Montaño, el Coronel Jorge Solís Casanova, prácticamente nunca ejerció la encomienda asignada en agosto del año pasado y sabe Dios que vería o de qué se enteraría, que formalmente tiró los fierros hace unos días, en una franca demostración de fuerza del alcalde Sergio Pablo Mariscal y el encargado del negocio Francisco Cano Castro.
Para que se den una idea de cómo se las gastan por esos rumbos, déjenme platicar lo ocurrido este miércoles pasado durante la llamada Mesa de Pacificación que se llevó a cabo a partir de las seis de la mañana en las instalaciones del 60 Batallón de Infantería, con sede en Esperanza, en donde se supone se diseñan las estrategias, se comparte información y se emprenden operativos comunes para atender la seguridad pública en el municipio.
Pues en esta ocasión no ocurrió así, ya que según asistentes a dicho cónclave Cano Castro pidió ser excusado para no participar, informando al comandante de ese cuerpo del ejército, Coronel Juan Casillas Marroquín, que por instrucciones del alcalde, no participarían en ningún acto, evento o reunión de trabajo donde estuviera presente el sub delegado del Gobierno de la República Bernabé Arana Rodríguez.
De ese pelo el exabrupto y más altisonante aún cuando ya retirado el policía consentido de Sergio Pablo, el jefe militar exigió de manera enérgica a Arana Rodríguez a que platicara con el munícipe para zanjar diferencias, para no afectar la coordinación de acciones en favor de los cajemenses y como Arana Rodríguez se pinta solo para eso de las prepotencias, se negó a tender dicho puente de conciliación ya que él solo rinde cuentas a Durazo Montaño y que solo de él recibe instrucciones.
Para acabar pronto, el comandante Casillas Marroquí se retiró de la reunión acompañado por otros militares, dejando en representación del ejército a un elemento que se encarga de apoyar con diapositivas y proveer de información de una computadora cuando así es requerida por los integrantes de la mesa.
Para que se den una idea de la clase de bronca interna que se trate la 4T en ese municipio, una vez ausentes los mandos militares y municipales, el subdelegado Arana comentó de manera sarcástica que la ingesta de Bacanora hacía efectos graves en la persona, en referencia al gusto del alcalde por esa bebida, y ya de plano para castrar, le mandó decir a Mariscal Alvarado que si se quiere separar del MORENA que no lo use a él como pretexto.
De ese pelo con esa bola de incompetentes que de buenas a primera se vieron en los cuernitos de sus lunitas y que ahora medio subidos en un ladrillo, medran con la incertidumbre ciudadana y despliegan sus más bajas pasiones para hacerse pedazos entre sí, sin que se sepa aún cual fue el sentido del informe que seguramente envió a sus superiores el Coronel Casillas Marroquí, y Jorge Taddei Bringas, jefe del orate Arana Rodríguez, se preguntarán, pues nada, meciéndose en la hamaca.
Es evidente que por rumbos del mentado partido político están del cocol, con un dirigente estatal, Jacobo Mendoza ausente y como adorno; ejercicio como dirigente de facto de Adolfo Salazar Razo, mientras en el Congreso del Estado todo indica que Ernestina Castro Valenzuela tiene los días contados como Coordinadora de ese grupo parlamentario, sobrevolando como zopilote para entrarle al quite, Martín Matrecitos Flores.
Al parecer a Castro Valenzuela se le hizo bolas el engrudo al atender a un grupo de inconformes que laboran en el Ayuntamiento de Navojoa y que exigen la revocación de mandato de la cuestionada alcaldesa Rosario Quintero Borbón, además que en nada le ayuda su dogmatismo y falta de oficio político que han sido la causa del pésimo saldo hasta ahora de dicha bancada.
Por cierto, vaya la zarandeada que sufrió la diputada María Dolores del Río Sánchez en el marco del III Foro del ISAF “Integridad Foro 2020”, a cuya sesión de trabajo acudió este jueves por su condición de presidenta de la Comisión Anticorrupción, teniendo que aguantar serias acusaciones de complicidad de parte de navojoenses que acudieron a dicha reunión para reclamar acciones legislativas más determinantes en torno al altero así de documentados actos de corrupción que atribuyen a la munícipe.
Por lo demás, valiera más que nuestro buen amigo el director general del Transporte, Carlos Morales Buelna le diera un buen entre al sistema de transporte que mueve diariamente a cientos de jornaleros en las distintas regiones agrícolas de la entidad, ya que son cada vez más frecuentes los accidentes por las pésimas condiciones mecánicas de las unidades y por el hacinamiento de su carga humana.
Nos consta la operación de vans que mueven a trabajadores desde San Pedro a zonas como Pesqueira y la neta uno no sabe cómo es que le meten 15 personas a un vehículo en donde apretaditos caben apenas ocho gentes, además de lucir en pésimo estado, sin que se sepa tampoco el que bajo esas circunstancias no ocurran con más frecuencia accidentes como el ocurrido la madrugada de este jueves, en el cual afortunadamente no hubo fatalidades.
Y la gobernadora se fue acá, a la cercana comunidad de La Colorada en donde inauguró el frontispicio de la primera iglesia de ese lugar que se integra al parador turístico, además de poner en operación la Casa Comunitaria que puso a disposición de ese pueblo la empresa Argonaut Gold, y corroborar así el compromiso de dicho corporativo con sus habitantes y en donde se ofrecerán talleres gratuitos de música, dibujo, pintura, danza y también talleres de valores, escuela para padres, prevención de adicciones entre otros.
Nos reportan por ahí al titular de la SEDESSON, Manuel Puebla; al alcalde Marco Antonio Platt; Jesús Gutiérrez Bastida, Vicepresidente de Asuntos Corporativos de Argonaut; al coordinador de medios del corporativo, Gustavo Álvarez, así como a la coordinadora de la nueva Casa Comunitaria, Lourdes McPherson, a quien dicho sea de paso, la mandataria felicitó por el trabajo realizado.
