A don Jorge Valencia Juillerat lo conocimos, tratamos y reporteamos desde que presidía la Coparmex Sonora-Norte y luego como presidente municipal de Hermosillo en el trienio 1997-2000, que llevó en buenos términos y sin aspavientos, quedando para el anecdotario regional aquella declaración respecto a que a veces se le “botaba la catota”.
Discreta y sin mayores protagonismos públicos su militancia en el PAN y como empresario de la construcción, destacando que durante su gestión al frente la comuna capitalina inició la introducción de la infraestructura para abastecer de gas natural por diversos sectores de Hermosillo y en términos generales fue considerado como un buen alcalde con un perfil no dado a poses políticas.
Pues hace un par de días Don Jorge falleció a la edad de 90 años y debe ser satisfactorio para su descendencia las generalizadas muestras de respeto y reconocimiento, que en medio de la pena y del luto, seguramente aminoran el sufrimiento y el dolor por su partida.
Cual debe y en función de su condición de expresidente municipal, el que la actual administración encabezada por Antonio Astiazarán Gutiérrez, haya ofrecido una ceremonia luctuosa en honor de Don Jorge, cuyas cenizas en una urna hicieron confluir a nueve expresidentes municipales de Hermosillo, quienes junto al actual munícipe honraron su memoria en sencillo evento llevado a cabo en la sede de la comuna capitalina, con la asistencia de la familia del fallecido.
Emblemática y hasta podríamos decir histórica la foto donde aparecen Casimiro Navarro, Héctor Guillermo Balderrama, Guatimoc Iberri, Francisco Búrquez, María Dolores del Río, Javier Gándara, Manuel Ignacio Acosta, Célida López Cárdenas y Fermín González Gaxiola, sin que tengamos idea del porqué de la ausencia de Ernesto Gándara Camou, Alejandro López Caballero, Angelina Muñoz, Raymundo García de León y Gastón González Guerra.
Como sea, buena onda el ceremonial realizado para honrar la vida y memoria de Don Jorge, en lo que fue una especie de paréntesis de la intensa agenda de trabajo que despliega por todos los rumbos del municipio el Toño Astiazarán, quien por lo visto, para todo se da tiempo, incluso para poner la mesa para el reencuentro de personajes que otrora también pusieron su parte en lo que ahora es Hermosillo.
Valga recordar que por allá en noviembre del 2019 fue la última ocasión que vimos y saludamos al caballero fallecido, cuando la entonces gobernadora Claudia Pavlovich le entregó el Premio Anual a la Ingeniería Sonorense “Ingeniero Rodolfo Félix Valdés”, en el marco de un evento organizado por el Colegio de Ingenieros Civiles de Sonora
Para movilizarse ya se ayudaba con una andadera, pero lucía como siempre y no, para nada se molestó cuando le recordamos aquella anécdota de la catota botada, sino al contrario, rio divertido al considerar que a todos en determinados momentos les pasa eso, en público o en privado.
Pues descanse en paz Don Jorge Valencia Juillerat, a cuya familia, amigos y demás seres queridos, les deseamos pronta resignación y extendemos nuestra solidaridad.
Mientras se llevaba a cabo la ceremonia descrita, en la moderna sala de prensa de la coordinación de Comunicación Social del Gobierno del Estado, el titular del ejecutivo, Alfonso Durazo Montaño daba su primera conferencia de prensa de este 2022, ejercicio al que estuvimos decididos a cubrir, pero como nos topamos con un caso de contagio cercano y con el que tuvimos contacto apenas el lunes, no quisimos ser factor de dispersión del virus en caso de que nos haya pegado el chauixtle y optamos por dar seguimiento a ese encuentro vía redes sociales.
Al mal tiempo buena cara, podríamos resumir el ejercicio del mandatario estatal ante la atiborrada audiencia de profesionales de la comunicación, y otros no tanto, y la verdad es que así como es de contagiosa la variante Ómicron del Covid-19, debería de ser contagioso su optimismo, cuando hay tantos indicios de que este arranque de año no es tan alentador.
En materia económica, la generalidad de instituciones, especialistas a nivel nacional e internacional, pronostican condiciones muy difíciles para la economía mexicana y como Sonora no es una isla, seguramente tendremos efectos indeseables en materia presupuestaria que pueden demorar la concreción de inversiones federales anunciadas para este año.
Ojalá no ocurra así y la fuerza del gobernador ante la instancia presidencial evite tal eventualidad, pero lo que no podrá evitar son los efectos de la escalada inflacionaria en el poder de compra de las clases medias y populares, a quienes tal circunstancia les impedirá valorar al 100 el que se inicien las mega obras anunciadas, ni podrán paliar con suficiencia las carencias con becas ni pensiones, cuyos montos ya fueron ampliamente rebasados por la acelerada alza de precios a artículos de consumo básico y servicios de primera necesidad.
Muy entrecortada la transmisión de la conferencia, pero de lo rescatado y escuchado, impresiona el desparpajo como se justifica el regreso a clases presenciales en educación básica en plena cuarta ola de la pandemia, cuando por todos lados se toman medidas preventivas y se limita la movilidad para evitar una dispersión acelerada del virus.
Pero a fin de cuentas, 20 mil estudiantes que asistieron a dos mil 850 planteles son pocos y deben representar un riesgo menor y de cuyas consecuencias podremos enterarnos en alrededor de cinco o seis días, que en todo caso, como dice el secretario de salud federal, Jorge Alcocer, al cabo que los niños pueden enfrentar covid-19 leve con te, vaporub y paracetamol, aunque nada dijo sobre si contagian a otros miembros de sus familias.
A fin de cuentas, llama la atención el chorizo zalamero del titular de la SEC, Aarón Grageda Bustamante, de quien teníamos un referente distinto, más técnico, formal, en tanto que por otra parte, sin salirse de su guion, el de Salud, José Luis Alomía, al dar a conocer la actualización de cómo está pegando en Sonora la pandemia.
Buena noticia el que en los últimos tres meses y cacho de la actual administración estatal se hayan tenido ahorros por alrededor de 500 millones de pesos, faltando saber qué hicieron con esa lana o si simplemente la tienen guardada o se trata solo de gastos no realizados porque no había con qué.
También buena la noticia respecto a que con el recorte presupuestal al Poder Legislativo, se construirá en Hermosillo la Casa del Estudiante de la Sierra y se rehabilitarán tres más para que quienes las habitan tengan espacios dignos.
Lupita Aldaco, titular del Instituto Sonorense de Cultura, repitió todo lo que se ha dicho cuando se anuncia la celebración del Festival Ortiz Tirado en Alamos, relativo a que se recuperará su esencia, se beneficiará a la economía regional, no se excluirá a nadie de la cultura y cosas así, quedando como novedad de que este año el evento se llevará a cabo de manera presencial, luego que la anterior edición fue de forma virtual, dadas las condiciones de pandemia, que al parecer ahora no importan.
Otra buena noticia es que la Secretaría de Hacienda autorizó ministrar 800 millones de pesos como adelanto de participaciones federales, por lo que se está en condiciones de pagar en tiempo y forma la nómina y las pensiones, entre otros gastos operativos de la maquinaria estatal.
Como decíamos, por razones ya explicadas no pudimos asistir a esa conferencia de prensa, cuando ya estábamos decididos a solicitar hacer una pregunta, una sola, para salir de la duda si el gobernador logró que la empresa minera Grupo México ya fijo su domicilio fiscal en Sonora para los efectos correspondientes que según algunos sería una chingonería.
Sabemos que el impuesto a la minería es de orden federal, pero alguna ventaja deben tener estados donde tributan, ya que si bien tales montos se derivan a la federación en los términos que define la ley de colaboración fiscal o algo así, permite espacios para negociar algunas retribuciones.
El anuncio al respecto lo hizo el mismo gobernador hace unas semanas y a lo mejor ya se concretó y solo falta que el titular de Hacienda, Omar del Valle Colosio la de a conocer, pero como sea, seguimos con esa duda.
Por lo demás, ya se formalizó el nombramiento de David Figueroa Ortega como representante del Gobierno de Sonora en Arizona, posición que en definitiva le queda a la perfección al de Agua Prieta, a quien hay que reconocerle sus habilidades para migrar con éxito de siglas partidistas, toda vez su acabada formación profesional y seriedad en el ejercicio de la política. Felicidades!.
