Samuel Valenzuela
Los partidos y actores políticos de este país saben aprovechar la falta de dientes, la actitud timorata y pusilánime del Instituto Nacional Electoral en materia de sanciones, para irse por la libre con sus campañas anticipadas sin ningún riesgo.
Aunque la oposición está enfilada a hacer lo mismo, por lo pronto, desde el 19 de junio pasado, al menos dos de las seis corcholatas del partido oficial que aspiran a la candidatura presidencial, perpetran actos de contaminación visual a lo largo y ancho del Estado de Sonora.
Han tapizado de repelentes imágenes infraestructura pública y con espectaculares de altísimo costo financiero, además de la flagrancia de eventos abiertos a la ciudadanía con discursos con obvio sentido electorero y que está tipificado como delito electoral, que incluye aparecer agarrados de las verijas presidenciales para jalar simpatías.
Heriberto Aguilar y la Sheinbaum.
Quienes han denunciado dichas marrullerías y evidentes actos ilegales, no contaban con la astucia de maquiavelitos de pacotilla, que con todo cinismo se deslindan de cualquier responsabilidad, alegando que la colocación de dicha propaganda es campaña negra de sus enemigos políticos e incluso solicitan a las autoridades para que investiguen.
Pues con esa evenflada salió el flamante coordinador de la campaña presidencial en Sonora de la chilindrina Claudia Sheinbaum, Heriberto Aguilar Castillo, quien con la manita en la cintura aseguró que el equipo de la mentada señora es ajeno a esas acciones ilegales que dañan la infraestructura comunitaria y cuya eliminación genera costos para autoridades municipales y del Estado.
Como dice el refranero popular, no podía saberse, porque en conferencia de prensa el extitular de SIDUR del gabinetazo de Alfonso Durazo Montaño, hizo un llamado a “la autoridad para que haga las investigaciones pertinentes y se sepa quiénes están haciendo esas pintas; la autoridad tiene que resguardar los espacios públicos del estado o municipio y se llegue a quien tiene la responsabilidad. Nosotros aclaramos es que no son pintas de nosotros”, apuntó, haciendo un gesto como de inteligente.
Rogelio Cota y Natalia Rivera.
Ese deslindo lo anunció en Ciudad Obregón, en donde también esos malosos que quieren perjudicar a la corcholata favorita de Palacio Nacional, han hecho de las suyas e incluso adelantó que él lleva a cabo sus propias investigaciones con resultados alentadores al saber ya que las pintas garabateadas por desconocidos no usan formas, imágenes ni la tipografía que usa su equipo para embarrar paredes.
En ese contexto de cinismo, el exfuncionario estatal se atrevió a inferir que los autores de esa propaganda ilegal son quienes hicieron la denuncia y exigieron reparación del daño en Hermosillo o sea Movimiento Ciudadano: “No identificamos quién es, sería muy irresponsable de nuestra parte señalar a alguien, pero lo que se nos hace sospechoso es que quien denuncia no haya primeramente seguido las líneas o los pasos de ir con las autoridades de ver quién es el responsable”, dijo ahora poniendo una cara de persona muy astuta, estulticia que seguramente recibirá puntual respuesta de la diputada naranja, Natalia Rivera Grijalva.
Amayrani Peña.
Pero ya en el paroxismo del cinismo, vea usted que quienes inventaron esa interfase del proceso electoral para iniciar precampañas cinco meses antes de lo que fija la ley con su elección de quien coordine la defensa de la transformación, interpusieron de denuncia en contra del PRI, PAN y PRD por hacer lo mismo, pero con el nombre de constructor o constructora del Frente Amplio por México, por tratarse de actos anticipados de campaña.
Por supuesto que ese INE aterciopelado, buena onda y complaciente, resolvió de forma idéntica que cuando resolvió recurso similar interpuesto por los mentados partidos aliados, además de dictar medidas cautelares para que no hagan esto y lo otro durante sus campañas anticipadas, que como se sabe, son letras muertas porque hasta ahora los aspirantes del oficialismo se las han pasado por el arco del triunfo y seguramente harán igual los de la oposición porque no hay consecuencias.
Por rumbos del conde pátula le están metiendo un dineral a la contratación de espectaculares ubicados a la vera de las carreteras y en estratégicas locaciones urbanas del Estado, en un sobrehumano esfuerzo por levantarlo de ese lejano tercer lugar, a pesar de operadores a su servicio de presunto gran calado como es el caso de la jefa de la oficina del ejecutivo, Célida López y que la diputada Amayrani Peña le ponga alma, corazón y bofe a tan difícil encomienda.
Chuy Villalobos.
En el caso de Marcelo Ebrard no se hace mucho ruido en ese sentido –actos anticipados de campaña—porque andan ocupados sustancialmente con nombramientos de coordinadores, desde cuida puertas, carga maletas, comisión de aplausos, acomoda sillas, de consignas, de sonido, de video, de damas de compañía, de efebos de compañía, propaganda legal, propaganda ilegal, ortografía, protocolos cívicos, de desayunos, comidas, cenas, hospedaje, de agenda, de abanicos, paraguas, de finanzas y de todo un ejército de capitanes que parece una plaga.
Al parecer ya se llegó a un acuerdo que sabe cuánto dure: se supone que el coordinador general de la campaña del excanciller en Sonora es Jesús Villalobos García, de acuerdo a un acuerdo dado a conocer por otro coordinador Julio Benavides, sin que se sepa a ciencia cierta la veracidad de tal versión, aunque luce lógico tal encomienda para quien fuera un buen operador electoral durante el padrecismo y uno de los efebos consentidos de Alejandro López Caballero.
Por si no recuerdan, El Chuy Villalobos fue parte de aquella camada que encabezó como secretario de hacienda López Caballero, que saqueó la hacienda pública por encargo de Padrés y luego le siguió en el ayuntamiento de Hermosillo.
Moisés Gómez Reyna.
En todo este rosario de triquiñuelas para eludir el cumplimiento de la ley, hasta el impresentable Gerardo Fernández Noroña ya pegó de gritos por la evidente inequidad de la competencia, exigiendo a su dirigente nacional una supervisión más estricta de los gastos de campaña de sus adversarios y compañeros de partido, pero si no le hicieron caso al INE, menos le harán al loquito de referencia.
Respecto a los acomodos en Sonora por el alto perfilamiento de Xóchitl Gálvez como la más competitiva de la oposición, nos comentan que por lo pronto el único sonorense que ya trabajo en tareas de coordinación es Moisés Gómez Reyna, de los mejor librados del gabinete padrecista y reconocido profesional de la Economía, además de un pulcro tránsito como diputado local.
Por otra parte, en concordancia a los resultados de su trabajo como presidente municipal de Hermosillo, Antonio Astiazarán Gutiérrez se encuentra entre los 10 alcaldes mejor calificados del país, al ocupar el sexto lugar entre los 150 municipios evaluados por la empresa Mitofsky.
Además, el munícipe quedó en el segundo lugar entre quienes gobiernan capitales estatales, municipios más poblados y costeros, para en un solo año pasar del puesto 17 al sexto en opiniones positivas de encuestados, lo cual además de generar la obvia satisfacción de él y su equipo de trabajo, representa un gran reto para seguir ascendiendo o al menos mantenerse en ese ánimo ciudadano.
Muy bien El Toño.
En nuestro caso no nos extraña para nada el alto índice de aprobación de Astiazarán Gutiérrez, porque nos consta que al menos en la zona nororiente del municipio, nunca como en estos tiempos la comuna había prestado tan buena y cercana atención en la prestación de servicios públicos y particularmente en apoyo al deporte y si sigue así pues en buena hora para él y para quienes vivimos por estos rumbos.
Y podemos informar que, así como Ernesto de Lucas ya tiene amarrada la cabeza de fórmula al Senado por Sonora postulado por Movimiento Ciudadano, el más firme para ir como su mancuerna es el también diputado local y exdiputado federal, Jorge Eugenio Russo Salido.
