Cada Navidad, Santa Claus se prepara para una misión épica: entregar regalos a millones de niños alrededor del mundo. A lo largo de los años, se ha creado una imagen muy específica del alegre personaje y su equipo de renos, quienes hacen posible esta travesía en la Nochebuena. Sin embargo, pocos se preguntan cuántos renos tiran el trineo y cuáles son sus nombres. Aquí te contamos todo lo que necesitas saber sobre ellos.
¿Cuántos renos tiran el trineo?
Tradicionalmente, Santa Claus cuenta con un equipo de ocho renos que tiran de su trineo. Estos renos son tan especiales que, según la leyenda, pueden volar y llevar a Santa y su carga a cualquier rincón del planeta en una sola noche. A estos ocho renos se les sumó otro muy especial, cuyo nombre ha alcanzado popularidad mundial: Rudolph, el reno de la nariz roja.
Así, hoy en día, el trineo de Santa suele contarse con nueve renos cuando se incluye a Rudolph.
Los nombres de los renos
Los nombres de los ocho renos originales fueron popularizados en el poema “Una visita de San Nicolás” (A Visit from St. Nicholas), escrito por Clement Clarke Moore en 1823. Los renos son:
- Dasher (Brioso) – Conocido por su velocidad y agilidad.
- Dancer (Bailarín) – Aficionado al ritmo y a los movimientos elegantes.
- Prancer (Acorralador) – Lleno de energía y siempre dispuesto a resaltar.
- Vixen (Juguetón) – De carácter divertido y vivaz.
- Comet (Cometa) – Se dice que trae alegría y felicidad a los niños.
- Cupid (Cupido) – Lleva amor y alegría en cada vuelo.
- Donner (Trueno) – Su nombre significa “trueno” en alemán, simbolizando fuerza.
- Blitzen (Relámpago) – “Relámpago” en alemán, rápido y potente.
A esta lista de renos se sumó después Rudolph, gracias a una historia de 1939, escrita por Robert L. May. Rudolph, con su distintiva nariz roja, se convirtió en un símbolo de inclusión y valentía. Su brillante nariz ayudó a guiar el trineo de Santa en una Navidad nublada, ganándose un lugar especial entre el equipo.
El espíritu de los renos en Navidad
Los renos de Santa representan algo más que nombres; simbolizan características que se asocian con la magia y el espíritu navideño: alegría, energía, rapidez y un poco de fantasía. Con cada mención, los niños de todo el mundo se llenan de ilusión, esperando escuchar el tintineo de sus pezuñas y la llegada del gran trineo.
Así que la próxima vez que veas una imagen de Santa y sus renos, recuerda que detrás de esos nombres hay una historia que ha perdurado por generaciones. ¡Y quién sabe! Tal vez, en algún lugar del cielo, están volando en este preciso momento.