Kafkiana la circunstancia de quienes en México se dicen de izquierda, liberales y progresistas y que desde los Estados Unidos reciben amplios reconocimientos de líderes de organizaciones fascistas por la solidaridad manifiesta del presidente Andrés Manuel López Obrador frente al drama que vive el derrotado presidente Donald Trump el pasado martes.
Grupos supremacistas armados hasta los dientes de Arizona, Texas, Nebraska y de estados del centro del vecino país del norte, están a la espera de la convocatoria de quien en los últimos cuatro años acuerpó y justificó sus frecuentes explosiones de violencia racista, mientras se solazan, porque de todo el concierto de las naciones del mundo, el presidente de México se ha negado a reconocer el resultado de la elección, que de acuerdo a la democracia gringa, el ganador es Joe Biden.
Y lo más contradictorio e incongruente, es que desde las mismas entrañas y verijas de la 4T, festinen esta unión de extremos que obviamente no lo son, al confluir en el mismo interés que comparten el orate del otro lado y el orate de éste lado, para fundirse en lo más rancio de la ultraderecha del hemisferio occidental, a contracorriente de sus verborreas progresistas.
Desde nuestra perspectiva, la pésima posición diplomática del gobierno mexicano; el simplismo ignorante del presidente al pretender justificar su rechazo; el reconocimiento que la 4T recibe de las camisas pardas incondicionales a Trump, y las jubilosas manifestaciones por lo que aseguran es una actitud digna de López Obrador, constituye la inmejorable oportunidad para desnudar la ultraderecha reaccionaria y conservadora que subyace en el gobierno morenista.
Difícilmente la 4T ni López Obrador podrán deslindarse las evidentes coincidencias con el gobierno de Trump y sus bases de sustentación, que para efectos de perfiles y personalidades, discursos y posiciones sobre las necesidades de la gente, el Covid-19, los medios de comunicación, parecieran estar frente a un espejo y sin duda, tales similitudes gravitan en la ni tan escondida solidaridad del presidente de México hacia el derrotado de Estados Unidos.
El populismo conservador y nacionalista de Trump y de López son coincidentes, como coincidentes son sus diarias catilinarias clasistas, divisionistas y las reiteradas expresiones de exclusión con las que dejan en claro que sus retorcidas políticas públicas se aplican sólo para quienes creen que votaron por ellos.
Por eso no extraña para nada la empatía manifiesta entre ambos personajes y el canillazo que le dio el mexicano al prestarse como instrumento de seducción de la numerosa comunidad mexicana que vive en Estados Unidos, apuesta que perdieron, porque ya se sabe que más del 87 por ciento de mexicanos con derecho a voto, lo hicieron por Biden.
De tan parecidos que son, sin duda lo ocurrido con Trump, debiera prender los focos rojos en la cofradía de la ultraderecha cuatroteniana, porque si en EEUU duró menos de cuatro años esa propuesta filofascista, pues acá la decepción y el desengaño podría manifestarse en la elección de junio del año próximo.
Por lo pronto, conforme avancen los días y Trump no conceda que perdió; si nadie le serena la hormona, no hay que descartar violencia paramilitar de parte de las numerosas bandas supremacistas que de forma abierta se mueven en diversas regiones de Estados Unidos, destacando particularmente Arizona, en donde desde el día de la elección, proceso de conteo de votos y hasta ahora, se mantienen apertrechados y patrullan fuertemente armados los alrededores de la oficina de elecciones, de donde han expulsado a simpatizantes del candidato demócrata.
Con esa calaña coincide la cúpula del gobierno de López Obrador y de MORENA, que por cierto, uno de sus congéneres más desprestigiados, o sea Alfonso Durazo Montaño, ya despliega su activismo electorero de forma abierta en Sonora, para cohabitar con el mazacote que conforman alcaldes, alcaldesas, diputados locales, federales, un senador proletario, consejeros y demás, en el marco de una reunión de cuyo contenido carecemos de noticias.
Y sabe a quien se le ocurrió que el desarraigado expriista, expanista, exmc y ahora morenista, convoque a una conferencia de prensa para este martes a partir de las seis y media de la mañana, lo cual deja ver que hasta en ese tipo de estupideces pretende calcar como aspirante a la gubernatura el que también dejara constancia de su incompetencia como secretario de Seguridad Pública Federal.
Pues si saben contar, no cuenten conmigo, que de todas formas pretender trasplantar en Sonora las llamadas mañaneras, no tendrá ningún buen futuro e incluso el iluso promovente podría hasta ser reconvenido por su amo de Palacio Nacional por tratar de disputarle su “derecho” de imponer agenda.
Esa estupidez pretendió implantarla Guillermo Padrés en los días siguientes de ser investido como gobernador de Sonora y si mal no recordamos no duró ni 10 días, quedando como éxito en todo caso, el programa de conferencias de prensa que daba Eduardo Bours Castelo todos los lunes.
Por su parte, Ernesto Gándara Camou recibe la natural atención ciudadana, luego de dar a conocer su plataforma para hacer confluir hacia su candidatura a la gubernatura a militantes de distintos partidos y los miles de sonorenses sin partido, eliminando posibilidades de reticencia que pudiera derivar si se hubiera apertrechado en el PRI.
Sin dudas, “El Borrego” está en mejores condiciones de construir una propuesta y proyecto amplio, compartido donde todas las voces sean escuchadas, sean de militantes de partidos políticos o de esa vasta mayoría sin partido, frente a retos que deben verse sin colores y sin facciones partidistas.
Interesante su carta de renuncia dirigida al líder de los priistas de esta entidad, Ernesto de Lucas Hopkins e irrefutables sus argumentos para justificar la decisión de presentarse frente al electorado estatal fuera de cualquier trinchera partidista, ya que los intereses de Sonora y de los sonorenses deben estar por encima de cualquier ideología, siglas, movimientos y demás, ratificando que su salida del PRI se da en los mejores términos y obviamente de común acuerdo, agregaríamos nosotros.
“Sonora no merece vivir con miedo, como no podemos permitir quedar a merced de quienes no aman a nuestro estado ni luchan por él”, apunta el exsenador de la república y exalcalde de Hermosillo, quien por lo pronto se mantiene a distancia de representantes de medios de comunicación, cuidando obviamente de no cometer violaciones a la ley electoral ni dar excusas a sus adversarios para que con denuncias en su contra, lucren de su popularidad.
A propósito, bien el popular “Pato” al reconocer la importancia de la decisión tomada por el virtual candidato a la gubernatura del PRI, del PAN y del PRD, por lo pronto, ya que como bien explicó, de los dos millones 200 mil sonorenses inscritos en el padrón electoral, sólo alrededor de 55 mil militan en algún partido político y por ello la necesidad de mandar el correcto mensaje lanzado por “El Borrego”.
Explicó que dicha fórmula de participación en el actual proceso electoral a lo mejor no solo aplica en el caso a la gubernatura, sino también en las otras 100 posiciones en disputa en las que el PRI postulará a su militancia, lo cual nos lleva a considerar la posibilidad, que en el caso de las posiciones donde vayan en coalición, decidan hacer lo mismo que “El Borrego”.
Y vaya que se le vino el mundo encima a Octavio Grijalva Vásquez a quienes observadores legislativos del Congreso del Estado, lo ubican como el favorito para ser designado titular de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, toda vez que ocupa el primer lugar de la terna de la cual decidirá el pleno en la sesión de este martes.
Desde nuestro punto de vista, el mejor perfil para dicha posición es Carolina María Flores Medina, sobreviviente la primera terna enviada por la gobernadora Claudia Pavlovich y que en la evaluación correspondiente apenas estuvo abajito del mejor calificado en aquella ocasión, Sergio Cuellar.
Irrefutables los antecedentes de Grijalva Vázquez como representante legal de un feminicida y que desde una visitaduría de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, operó para que el victimario resultara favorecido con leve sentencia, de acuerdo a un altero así de denuncias sobre esa actuación.
En principio creímos que esa propuesta venía del PAN, dando por descontado que sería apoyada por los diputados del PRI, toda vez el ambiente actual de concertación entre ambos partidos, pero no, ya que sin importar sus antecedentes cercanos al panismo, nos aseguran que la propuesta viene de MORENA, sin que tengamos idea si esas siglas podrán hacer que el citado supere el retén legislativo. concertación entre el PRI y el PAN, podría pensarse que el exconsejero electoral afín al padrecismo, Grijalva Vázquez podría superar el retén legislativo empujando.
