
En 1994, la repentina desaparición de Jacobo Grinberg dejó a México y al mundo académico en suspenso. Científico, psicólogo y pionero en el estudio de la conciencia, Grinberg dedicó su vida a la intersección entre la ciencia y el misticismo, explorando fenómenos de percepción extrasensorial y conexión mental entre humanos. Sin embargo, justo cuando su trabajo comenzaba a ganar más notoriedad, desapareció misteriosamente en Ciudad de México, dejando un legado de teorías, experimentos y preguntas sin respuesta.
El contexto de su investigación
Grinberg se formó en psicología en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y realizó estudios avanzados en neurofisiología en Nueva York. Su trabajo se centraba en lo que él denominaba “la red de conciencia”, una teoría que buscaba probar la existencia de una interconexión mental universal. En sus estudios, Grinberg colaboró con chamanes y exploró prácticas esotéricas que lo llevaron a profundizar en la telepatía y otros fenómenos poco aceptados por la ciencia convencional【9†source】【10†source】.
A lo largo de su carrera, Grinberg publicó más de 50 libros y artículos que documentaban sus descubrimientos. Entre sus estudios más conocidos destacan aquellos realizados junto a la chamana mazateca Pachita, cuya habilidad para realizar “cirugías psíquicas” fascinó y desconcertó al científico. Estas investigaciones, aunque controversiales, le ganaron seguidores y detractores, posicionándolo como una figura enigmática dentro y fuera del ámbito científico.
La desaparición: una trama de misterio
El 8 de diciembre de 1994, Jacobo Grinberg desapareció sin dejar rastro, a solo unos días de su cumpleaños número 48. Su esposa, Teresa Mendoza, reportó su ausencia con una sorprendente calma, argumentando que era habitual que el científico se ausentara sin previo aviso. Sin embargo, quienes conocían a Grinberg de cerca, especialmente sus colaboradores, sabían que él era sumamente disciplinado y comprometido con su trabajo, lo cual hizo que su desaparición fuera aún más inquietante.
El caso quedó en manos del comandante Clemente Padilla, un investigador con amplia experiencia. Durante su investigación, surgió una pista enigmática: un testigo aseguró haber visto a Grinberg en Boulder, Colorado, donde presuntamente fue llevado por agentes estadounidenses en una avioneta privada. Padilla descubrió además que el científico mantenía una colaboración secreta con la Universidad de Colorado, y que realizaba viajes frecuentes a Estados Unidos bajo circunstancias poco comunes【8†source】【9†source】【10†source】.
Las teorías: ¿Agencias secretas involucradas?
La hipótesis de la participación de agencias extranjeras, como la CIA, surgió debido a la naturaleza de sus investigaciones. Sus estudios sobre telepatía, percepción extrasensorial y conciencia universal parecían incómodos para ciertas esferas de poder. De acuerdo con el documental El secreto del doctor Grinberg, dirigido por el cineasta español Ida Cuéllar, varios colegas y familiares consideran plausible que su desaparición esté relacionada con alguna agencia de inteligencia interesada en sus investigaciones sobre la mente humana y el poder de la conciencia.
Algunos seguidores de su trabajo creen que su teoría de la “sincronización cerebral” –es decir, la capacidad de dos mentes de conectarse telepáticamente– representaba un conocimiento que podría ser utilizado tanto para el beneficio de la humanidad como para fines más oscuros. Esta teoría plantea que Grinberg pudo haber sido secuestrado o reclutado por fuerzas interesadas en aprovechar sus conocimientos para experimentos clandestinos, idea que se fortalece con el testimonio del trabajador de una gasolinera, quien afirmó haberlo visto en compañía de dos agentes de aspecto extranjero【10†source】.
La esposa desaparecida y las inconsistencias en la investigación
Otra figura clave en la desaparición de Grinberg es Teresa Mendoza, su esposa, quien también desapareció poco tiempo después. Su comportamiento fue considerado extraño desde el principio, ya que, en lugar de alertar a las autoridades de inmediato, minimizó la situación, diciendo a familiares y amigos que el científico estaba en un retiro espiritual. Su falta de cooperación y su posterior desaparición han alimentado las especulaciones de que podría haber jugado un papel en el enigma.
La investigación de Padilla también enfrentó obstáculos. Tras avanzar en la indagatoria y descubrir rastros de los viajes de Grinberg a Estados Unidos, Padilla fue inexplicablemente relevado del caso. Este hecho sembró aún más dudas, especialmente entre quienes creen que Grinberg podría haber sido silenciado debido a la relevancia de sus descubrimientos. La poca transparencia en las investigaciones oficiales y la falta de respuestas han contribuido a mantener este misterio vivo hasta el día de hoy【9†source】【10†source】.
Legado y controversia: La búsqueda de una respuesta
A pesar de la incertidumbre que rodea su desaparición, el legado de Jacobo Grinberg ha perdurado. Sus teorías han inspirado documentales, libros y estudios posteriores. Grinberg abrió el camino para una visión de la mente que va más allá de las fronteras establecidas por la ciencia tradicional, al punto de ser considerado un visionario para algunos y un excéntrico para otros.
La psicóloga Ruth Cerezo, quien fue su colaboradora, ha señalado que aunque muchos lo consideraban “loco” en su tiempo, actualmente el interés por replicar sus estudios está en auge. A medida que la ciencia contemporánea se abre a estudiar la conciencia y las conexiones mentales, Grinberg es reconocido por haber explorado un terreno pionero que anticipó temas que hoy generan fascinación en la neurociencia y la física cuántica【10†source】.
Conclusión: Un enigma sin resolver
La desaparición de Jacobo Grinberg sigue siendo un misterio que, con el paso del tiempo, ha adquirido tintes casi míticos. La falta de pruebas concluyentes, el papel ambiguo de su esposa y las teorías de conspiración en torno a agencias de inteligencia crean una atmósfera que alimenta el enigma. Grinberg, quien buscaba desentrañar los misterios de la mente y el universo, se convirtió él mismo en un enigma, dejando un vacío en el ámbito de la ciencia y en la historia de México.
Hoy, su vida y su desaparición plantean preguntas sobre los límites de la ciencia, el potencial de la mente humana y el precio de explorar lo desconocido. La búsqueda de respuestas continúa, y aunque el paradero de Jacobo Grinberg sigue siendo un misterio, su trabajo permanece como un recordatorio de que algunos enigmas desafían incluso los métodos más rigurosos de la investigación científica.
