La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) registró un retroceso significativo en el QS World University Ranking 2026, al pasar del puesto 94 al 136, saliendo del grupo de las 100 mejores universidades del mundo, posición que había mantenido durante dos años consecutivos.

De acuerdo con el informe publicado por Quacquarelli Symonds (QS), el estudio evaluó a 1,500 instituciones de educación superior en más de 100 países, considerando criterios como reputación académica, empleabilidad, investigación, sostenibilidad y proyección internacional.
Esta caída de 42 lugares representa el nivel más bajo que ha alcanzado la UNAM en la última década, lo que ha encendido la discusión sobre los retos que enfrenta la máxima casa de estudios de México en términos de inversión, actualización tecnológica, competitividad internacional y vinculación con el sector laboral.
Aunque la UNAM sigue siendo una de las universidades más reconocidas de América Latina, el descenso en el ranking plantea interrogantes sobre las estrategias a seguir para recuperar su posición entre las instituciones de élite a nivel global.
Especialistas y académicos han comenzado a analizar los factores que pudieron influir en esta baja, entre ellos la falta de recursos, la burocracia institucional y los desafíos para adaptarse a un entorno universitario global cada vez más competitivo.