La reunión de la gobernadora Claudia Pavlovich con 54 alcaldes electos de diversos partidos políticos se dio en un ambiente de cordialidad y de respeto institucional, destacando el interés del gobierno estatal y municipal por trabajar en unidad y coordinados para que a los sonorenses las vaya bien.
Una vez más la gobernadora Pavlovich en pleno respeto a la pluralidad política que vive el estado ofreció su mano extendida a los presidentes municipales electos emanados del PRI-PVEM-Panal, PAN-PRD, MAS, MC, etc., para trabajar por las causas de la gente, alejados de filias y fobias político-partidistas, dejando atrás las campañas políticas.
“Siempre contarán conmigo, con la mano extendida”, les recalcó la mandataria sonorense a los alcaldes electos de todos los colores en la reunión en el Centro de Desarrollo Municipal (CEDEMUN) a donde acudieron los próximos munícipes a una capacitación para gestionar recursos.
A esa reunión no acudieron la casi veintena de alcaldes electos de la coalición Morena-Partido del Trabajo y Encuentro Social, como parte del berrinche porque el Congreso del Estado aprobó las reformas constitucionales, y hasta por la aprobación posterior por parte de los municipios.
En una misiva enviada a la mandataria sonorense, los 18 alcaldes electos de Morena-PT y PES exponen que están dispuestos al diálogo abierto y respetuoso, pero condicionan a que en ese evento estén presentes también legisladores estatales y federales de esa coalición opositora.
La alcaldesa electa de Hermosillo, de extracción morenista, Célida López, fue más allá y a través de Twitter exigió al gobierno estatal que no fuera interlocutor con ellos el secretario de Gobierno, Miguel Ernesto Pompa Corella.
Como vemos los alcaldes, legisladores y dirigentes de la coalición de Morena-PT-PES quieren gobernar al gobierno, y pretenden tenerlo acotado y sumiso a sus caprichos, sin el menor respeto a su investidura de un poder soberano electo al igual que ellos por la ciudadanía.
El bloque morenista pretende mantener de rehén a la gobernadora Pavlovich bajo el chantaje de que son mayoría en los gobiernos municipales y en el Congreso del Estado, pero la mandataria no es de las que se dejan curar paradas.
Los morenos tienen que entender que el proceso electoral y las campañas políticas ya quedaron atrás, y que tienen que conciliar, dialogar y llegar a acuerdos entre los poderes, y no pretender maniatar al Poder Ejecutivo, mucho menos ordenarle quitar y poner funcionarios.
La gobernadora Pavlovich ni nadie, puede negociar con quien le apunta con una pistola, y en esa posición están los morenistas, al recriminarle a la mandataria estatal por ejercer sus funciones constitucionales.
En el evento con los 54 alcaldes electos, la gobernadora Pavlovich hizo un llamado a dejar de lado los colores de partidos y las campañas del pasado proceso electoral, y enfocarse en la encomienda que les dieron los ciudadanos al frente de sus respectivos municipios.
“Las campañas ya terminaron, es hora de trabajar en beneficio de todas y todos sin distingo de colores, cuentan conmigo siempre, y todas las atenciones de mi gabinete para que ustedes no se sientan solos y no sientan que están solos sus ciudadanos”, dijo en el evento en el que saludó a cada uno de los alcaldes electos que estuvieron presentes como una muestra del trato directo y respetuoso que tendrá con cada uno de ellos, como lo ha sido en estos tres años como una gobernante municipalista.
En entrevista al final del evento en el CEDEMUN, la gobernadora Pavlovich lamentó la ausencia de los alcaldes electos morenistas en este primer encuentro entre gobierno estatal y gobiernos municipales electos.
“El comportamiento de los alcaldes electos de Morena, no va con la línea de trabajo que maneja el Presidente electo Andrés Manuel López Obrador, ya que ha pedido a los gobiernos estatales que trabajen unidos los tres órdenes de gobierno”, dijo, y que cuando López Obrador los ha invitado a platicar, todos los gobernadores han acudido al diálogo.
Ya entenderán los morenistas a partir del 16 de septiembre en que tomen posesión los alcaldes que no es lo mismo ser candidatos a ser gobierno, y que las prácticas de desplantes, agresiones verbales y toma de calles como si estuvieran en el DF, tendrán que dejarlas en el pasado, porque corren el riesgo de sufrirlas en carne propia por sus propios gobernados, ante la ausencia de resultados por una mala relación o ruptura con el gobierno estatal, porque cuando menos los primeros tres meses de sus incipientes e inexpertos gobiernos, estarán abandonados por el gobierno federal y sus super delegados federales.
Como es tradición, antes de diciembre, iniciará la peregrinación de alcaldes de todos los colores y de todos los rincones de Sonora hacia Palacio de Gobierno, en busca de la mano amiga que los ayude a pagar nóminas, prestaciones sociales y aguinaldos, así como créditos emergentes para iniciar bien el año porque los que se van no les dejarán ni lápices, por lo que no pueden morder la mano que se extiende generosa a ayudarlos. (g_navarro_ruiz@hotmail.com)
